El presidente de Toyota, Daniel Herrero; el CEO de Globant, Martín Migoya; y la CEO de Pernord Ricard, Constanza Bertorello, coincidieron en que sus empresas cerraron 2020 con resultados positivos y se manifestaron esperanzados para el año 2021. Además, los tres CEOs señalaron que fue un año muy difícil, pero de grandes aprendizajes, según informaron desde la firma KMPG. De todos modos, su mirada contrasta con un sondeo realizado por IAE, donde el 61% de los ejecutivos encuestados observan mayores complicaciones para 2021.
Cerramos un año bueno a pesar de todo. Y la decisión de poner en marcha una planta en un contexto de incertidumbre fue la decisión más difícil de toda mi historia como líder; se ponía en juego la salud no solo de tus colaboradores sino también la de sus familias", señaló Herrero, quien junto a Migoya y Bertorello participaron en un encuentro de Reconocimiento a la mujer destacada en el ámbito empresarial 2020 organizado por la entidad internacional WomenCorporateDirecotrs.
"Gracias a un protocolo muy seguro que pusimos en marcha en todas las terminales del país, estuvimos por debajo de los índices de los lugares donde operamos y pudimos superar los niveles de producción, agregó el directivo de Toyota.
Este mes estamos llegando a niveles superiores a los anteriores a la pandemia. Esta situación que vivimos nos dejó como resultado positivo el diálogo entre gobierno, sindicato, empresa y trabajadores, el consenso logrado y como pudimos salir adelante. Creo que esto deberíamos aplicarlo para el país, cada vez que la argentina dialogó, le fue bien, concluyó Herrero.
Por su parte, Bertorello indicó que tuvimos que enfrentarnos a un consumidor que está cambiando y tiene hábitos distintos por la pandemia y la cuarentena. Por eso tuvimos que reinventarnos. El 27% de nuestro negocio pasaba por bares, restaurantes y discos: todos lugares que estuvieron cerrados; pero logramos desarrollar todo lo relacionado al consumo en el hogar, como parte de la socialización y a través de la digitalización y la virtualidad. Lo tuvimos que hacer sobre la marcha, reinventar el negocio.
A su turno, Migoya expresó que vivimos un proceso de aceleración que transformó digitalmente a muchísimas compañías y estamos terminando el año con un empuje y crecimiento. Cuando empezó la crisis no pensamos terminar el año así, estamos sorprendidos". Luego, agregó: Finaliza un año de mucho aprendizaje y en el cual hubo que estar muy cerca de la gente con una gran incertidumbre y gente dolida, y con nuevas formas de trabajo. Fue un año de descubrimiento absoluto desde el principio al final.
Un sondeo organizado por IAE Business School y coordinado por Eduardo Fracchia donde se consultó a 571 ejecutivos sobre la facturación de este año y las expectativas a futuro, arrojó que el mayor porcentaje (37%) alcanzó una facturación en línea con lo presupuestado. Le sigue un 33% en el que la facturación estuvo entre el 30 y 50% debajo de lo esperado, y en tercer lugar, un 14% en el opuesto: entre el 30 y 50% por encima de lo presupuestado. Los extremos son minoría: el 9% se sitúa en más del 50% por debajo de lo presupuestado, y solo el 7% más del 50% por encima.
Esta disparidad es lógica siguiendo la también dispar incidencia de la pandemia según el sector de actividad, y según Fracchia Constituye además una descripción auto explicativa de cómo se acertó o no con el desempeño para hacer frente a la crisis.
Cuáles son las expectativas para 2021
En relación a las perspectivas del próximo año, el presidente de Toyota se mostró esperanzado al asegurar que en la automotriz a esta altura tenemos una demanda que está por encima en un 35% de lo que hicimos este año. También recordó que hay proyectos en marcha y que cuanto más diverso sea el universo donde hay que tomar las decisiones, se estará más seguro.
El optimismo de los empresarios de Toyota, Globant y Pernord Ricard contrasta con la opinión de los ejecutivos que fueron consultados por IAE Business School. Si bien la mayoría de los directivos descarta una eventual hiperinflación, y la mayoría de las empresas logró este año mantener o incluso aumentar la facturación presupuestada, un 61% de los encuestados observan mayores complicaciones por lo menos para el próximo año.
Inflación esperada
La muestra estuvo compuesta por 571 ejecutivos y empresarios, tanto del segmento pyme como de firmas grandes, mayoritariamente nacionales. En mayor porcentaje (48%), los empresarios perciben una inflación menor a 50% para 2021, pero hay otra porción representativa (40%) que prevé una inflación más elevada (de hasta el 70%). En promedio, la previsión queda entonces más cerca del 60%. La previsión de una inflación muy alta es marginal, y prácticamente también se descarta la hiperinflación (suman solo el 12% de los encuestados entre ambos pronósticos).
El futuro próximo de la economía
Respecto a la visión de futuro en la pregunta sobre la situación del país en los próximos años, se evidencia pesimismo en la mayoría de los empresarios: el 61% considera estará peor, el 22% por lo menos igual, y solo un 17% augura mejoría. Pensamos que el difícil panorama que se percibe se fundamente en la inflación instalada, la profunda recesión, los problemas fiscales, falta de un plan económico concreto, sumado a las tensiones políticas al interior del gobierno, sostiene Fracchia respecto a esta visión de mediano plazo.