Fue como un déjà vu de lo sucedido el 18 de diciembre, pero sin precedentes. Sobre el escenario del Festival de Cannes de 2023, el equipo de GUT, enardecido, agitaba la bandera argentina, porque acaban de consagrarse campeones: fueron elegidos Agencia del Año. A un costado, cabizbajos, una agencia de Francia se quedaba con el segundo lugar. Esa noche, GUT batió todos los récords, tanto que el director del Festival les había anticipado: “Traigan valijas”. Volvieron llenas de leones.

Es que esa noche no solo ganó Agencia del Año, también se coronó como Red Independiente del Año y Red Regional del Año por Latinoamérica. Además, GUT Buenos Aires obtuvo en total 19 premios, incluyendo dos Grand Prix por sus trabajos para Stella Artois y PedidosYa, siendo la primera vez que una agencia argentina logra dos GP en una misma edición.

En tan solo cinco años, la agencia fundada y liderada por Gastón Bigio y Anselmo Ramos hoy está en lo más alto de su industria. Son un faro que atrae nuevos clientes porque demostró la importancia de tener buenos talentos en los equipos. Y Bigio es consciente de eso, porque trabajó estos años con ese objetivo en mente.

¿Qué sigue ahora? ¿Cómo se sienten?

Bajando, tratando de digerir todo, porque estuvo buenísimo. Esto es para que la gente de la agencia pueda seguir sacando lo mejor de cada uno. Hay que digerir y bajar, porque la gloria puede marear y alejarte de la realidad. Sabíamos que teníamos buenas campañas, pero no imaginamos que iba a suceder. Aunque sí es lo que queríamos hacer: llegar a este punto y mirar para adelante.

Muchos dicen que estos logros son el resultado de, incluso, generaciones anteriores. ¿Creés que es así?

Los argentinos tratamos de buscar el esfuerzo en todo. Esto no fue esfuerzo, fue un montón de talento que se juntó para que este equipo pudiera hacer un laburo muy bueno. Siempre es más fácil hablar de la pasión o del esfuerzo, porque nos cuesta más decir que fuimos más eficientes, que se generó un mejor laburo, que se dedicó tiempo. Esto es resultado de un plan diseñado, profesional. Pero es menos romántico que decir que fue la pasión. Si no estaba el talento, esto no pasaba.

El plan funcionó…

La agencia pasó de ser una sin leones en Cannes a ser la número uno del mundo. Con la pasión no habíamos llegado. Y la habíamos puesto, pero no teníamos ni el talento ni las inversiones. Este fue un año de laburo infernal, con el Mundial en el medio, y eso nos dio mejores frutos.

¿Qué cambió en el talento de la agencia?

La agencia llegó a un punto de maduración y esto tiene que ver con la acumulación de talento. El día de la entrega de premios, a Cannes viajaron cinco directores generales creativos, dos CCO, éramos ocho personas de alto cargo allá, y eso no existe. Esta es la acumulación de talento de alto nivel. Es difícil explicar la energía en la agencia, es muy profunda, y esto podría hacer que los jóvenes se mareen, se confundan, pero todo lo contrario: está sacando lo mejor. Ahora nos podemos comer el mundo. Hicimos la campaña de Noblex para el mundial de fútbol femenino, en la que con IA logramos que Gilda le cante al equipo.

Suma de campañas

El año de GUT está lleno de hitos, desde la campaña del “El gerente” de Noblex, que tuvo su segunda versión para el último Mundial, hasta la de Pedidos Ya también para la Copa del Mundo, pasando por poner el premio de Gran Hermano en una cuenta de Mercado Pago y así visibilizar cómo se gana con rendimientos diarios. También el uso de la IA en la premiada campaña “La probabilidad”, para Stella Artois. Pero el trabajo viene de antes. Fueron los socios de GUT los que le pidieron a Cannes que sumara la categoría de Red Independiente. En la primera entrega salieron segundos. “Este año solo atinábamos a ese premio, el de Red Independiente, pero terminaron siendo tres leones: Agencia Independiente, Red Independiente y Agencia del Año”, enumera.

¿Esa noche llegaron con un presentimiento?

Nos llamaron a la mañana. Por nuestro lado, veníamos haciendo cuentas y ya no lo podíamos creer. Estaba PwC haciendo los números del certamen y nosotros en presentaciones con clientes, entonces me llama el presidente del Festival y me dice: “Pasó algo sin precedentes”. Y era que ganamos tres de los de siete leones de la noche.

¿Qué sentiste en lo personal?

Me pasó como a Messi: “Ya está”. Estás todo el día queriendo demostrar algo, que hay un legado en nuestro trabajo. La consagración nos sacó una mochila.

¿Ya empezaron a notar aumento de demanda?

La cantidad de clientes que entran por el mail de contacto de la web. Y cuando ves las marcas te caés de… 

¿Pensaron en agrandar la estructura?

La agencia se va agrandando a medida que toma clientes. Empezamos dos y hoy somos más de 500, pero el crecimiento siempre fue orgánico. Los que nos permiten contratar talentos son los clientes. Invertimos mucho. Esto nos permite tener una mayor captación de profesionales en un escenario dificilísimo en la industria en la Argentina, porque los mejores talentos prefieren trabajar para afuera o incluso migrar. La gente que se queda no es la que abunda y esto nos ayuda a tratar de ser más “sexys” para esa gente. Sin embargo, dame siempre a Argentina, el talento local, porque tiene ingenio y fuerza para hacer. Esta es la gran magia de la gente de este país.

¿Cuáles son los planes para 2023?

Estamos como si recién hubiéramos arrancado el año. Con ganas de ir por todo, es como salir en el minuto 45 con la frescura del minuto cero. Estamos trabajando en entender cómo estas oportunidades se pueden capitalizar para los clientes nuevos y para los actuales.

¿Parte del éxito de GUT son las relaciones de largo plazo con los clientes?

Los clientes son amigos. Son relaciones a base de trabajo profesional y de hacer crecer a las marcas. Hay mucho respeto y una profunda relación humana. Cuando vamos a los clientes y les proponemos hacer cosas raras hay confianza de que no ponemos tu marca en juego. Entonces, te permiten romper moldes. Somos profesionales mundialmente celebrados.