La presidenta y CEO de Luft Energía explica la importancia del parque eólico Corti en la transformación de la matriz energética del país.
Nuestro país depende de los hidrocarburos. El 86 % de su matriz energética proviene del gas y el petróleo.
Sin embargo, los habitantes de Bahía Blanca son los primeros testigos de que la transición energética en la Argentina se puso en marcha. A la vera de la ruta 51, a 20 kilómetros al noroeste de Bahía Blanca, se pueden ver los 29 aeronavegadores que dan inicio formalmente a la transformación de la matriz energética del país.
El presidente Mauricio Macri junto a Doris Capurro y los hermanos Marcelo y Damián Mindlin de Pampa Energía en la inauguración del parque eólico Corti.
En los próximos años veremos cómo el país, más rápido de lo que nos demos cuenta, inclinará progresivamente la balanza a favor del aprovechamiento del viento y el sol como fuentes de energía. Una vez más, tenemos la suerte de estar bendecidos por nuestros recursos naturales. Nos falta todavía saber si somos capaces de ponerlos en valor.
Corti es el primer hito que comienza a escribir una nueva página en la historia energética del país. Es el primer proyecto de Renovar 1 que entra en producción y el primero en la provincia de Buenos Aires, antes incluso de los tiempos comprometidos en el contrato con CAMMESA. Este no es un punto menor, ya que la credibilidad del proceso renovable en Argentina depende de que los grandes proyectos cumplan, tanto del lado de los inversores como de los constructores, los compromisos ofrecidos en las licitaciones.
Además se sembró la semilla para que nuestros ingenieros y trabajadores sean los que tomen las riendas de futuros parques de este tipo en todo el país. La empresa VESTAS aportó los 29 aeronavegadores con tecnología de punta que generarán 100 MW de potencia, y también trajo a sus expertos para dirigir las obras. Con la supervisión de Pampa Energía se logró, de esta forma, que los profesionales locales queden capacitados para que sean ellos los que, en la próximas obras, lideren los procesos de construcción.
Las torres miden 87 metros, un tamaño mayor al del Obelisco de Buenos Aires. Cuando la fuerza del viento los mueve, cada aeronavegador llega a los 150 metros y tienen una capacidad de generar más de 400 GWh/año, el equivalente al consumo anual de 6.900 hogares de Bahía Blanca.
Adjudicado en Renovar 1, la inversión total fue de US$ 140 millones y forma parte del plan de Energías Renovables de Argentina. Si bien la meta que establece la ley 27.191 es que para 2025 el 20 % de la energía que utilice el país provenga de los renovables en reemplazo de los combustibles de origen fósiles, no hay dudas de que se van a superar todas las predicciones.
En el mundo, los avances que se están registrando en esta materia son notables y, cuando se comiencen a almacenar la energía solar y eólica, el petróleo y el gas empezarán a ser parte de nuestra historia pasada.
En tiempos donde todos hablan de grietas y confrontaciones, la ley 27.191 es un ejemplo de política de estado, de consenso. Es una ley presentada por el Gobierno anterior, que se sancionó en 2015 por unanimidad en el Congreso y apoyada por el actual Gobierno para ponerla en marcha.
En nuestro rol de articuladores entre el desarrollador (Pampa Energía), las instituciones multilaterales que dieron el crédito (Bid/IIC) y el inversor extranjero (Castlaleke), creemos que se puede lograr replicar esta exitosa experiencia y hacer que el viento sople a favor de nuestro país y que el sol salga todos los días con más energía.