La pandemia nos obligó a adaptarnos, con agilidad y flexibilidad, a las nuevas realidades. Muchos de los cambios resultantes permanecerán, asegura el CEO y Country Head de Santander Argentina, Alejandro Butti. Para ponerlo en números, el uso de la web se incrementó un 40% desde el inicio de la pandemia. Hoy procesamos más de 10 millones de transacciones por mes y el 90% son digitales o automáticas, refuerza. Además, el 83% de las ventas son digitales y abrió 500.000 cuentas a través de su onboarding totalmente digital.
- ¿Qué pasó con los préstamos y depósitos del banco?
- Con una cartera de préstamos al sector privado no financiero mayor a los $550.000 millones, Santander Argentina tiene una cuota de 10,5% del mercado de financiaciones. En términos reales, las financiaciones se redujeron levemente el año pasado (un 1,4% respecto de diciembre 2020, en el segmento de moneda extranjera, pero también tuvimos crecimiento de préstamos prendarios y comerciales. Somos el primer banco privado por volumen de depósitos. Se redujeron un 5,3% en términos reales respecto del mismo período del año anterior, con un incremento en la cartera en pesos, apalancado por los plazos fijos, y un decrecimiento de la cartera en moneda extranjera.
- ¿Creció el nivel de morosidad?
- Tuvo un crecimiento vinculado mayormente a las consecuencias de la pandemia en la economía. Nuestra ratio de mora se ubica en 3,6% frente al 2,3% de diciembre de 2020. En la medida en que las variables económicas comiencen a mejorar, debería ocurrir una baja.
- ¿Cuáles son los proyectos para 2022?
- Hay varios sectores estratégicos. Pero un segmento que queremos impulsar es el del agro, porque es clave en su contribución a la economía. Tenemos más de 100 acuerdos de financiación con empresas proveedoras de múltiples productos y servicios para el sector agropecuario, para que nuestros clientes puedan encarar la producción con mayor respaldo.
En el mismo sentido, y reforzando nuestro compromiso en dos ejes estratégicos como son la innovación y el cuidado del medioambiente, lanzamos una alianza con Agrotoken, una iniciativa que convierte a Santander en el primer banco del mundo en respaldar préstamos con tokens relacionados a commodities agropecuarios como soja, trigo o maíz.
- ¿Y hacia adentro de la compañía?
- Queremos profundizar nuestra transformación cultural y digital, con eje en la diversidad, la agilidad y la inclusión, porque las personas son el corazón de la organización. Este año continuaremos construyendo la mejor plataforma abierta de servicios financieros de la Argentina. Seguiremos dando forma a nuestro ecosistema, trabajando en el desarrollo y consolidación de nuevos negocios digitales. En el último año y medio inscribimos 5 nuevas empresas en la Argentina (GetNet, Santander Consumer, OpenBank, entre otras). En materia de sustentabilidad, el año pasado lideramos la colocación del primer bono sustentable del país y fuimos colocadores de la primera ON emitida por una Asociación Civil (TECHO). Esta operación representó el primer bono etiquetado como social en Argentina. Esto consolida nuestro compromiso con el desarrollo de productos sustentables (ESG). Además, sellamos una alianza inédita en el país con Enel X para impulsar la transición hacia energías limpias de las pymes y empresas argentinas.
-¿Proyectan nuevas inversiones?
- Las inversiones en tecnología serán centrales. De aquí a 2024 invertiremos US$ 225 millones en tecnología, como anunció a fines del año pasado Ana Botín, la presidenta del Grupo Santander, cuando estuvo en el país.
- ¿Cuáles son las principales variables macro que mira?
- Este año la atención del mercado va a estar centrada en las cuestiones ligadas al acuerdo con el FMI. El acuerdo es importante porque evita que Argentina entre en una situación de atrasos con el Fondo. Luego del fuerte crecimiento de 2021, esperamos un crecimiento cercano al 2% y una inflación del 54,5%.
- ¿Cuáles son las variables que tienen mayor impacto y qué se necesita para mejorar y crecer?
- El sistema financiero ha ratificado que es parte de la solución. Se ha transformado en un activo que contribuye a la estabilidad, aun en contextos desafiantes. Actuó como amortiguador, y no como propagador de los períodos de volatilidad. El sistema financiero argentino y Santander están sólidos, con buenos niveles de capitalización, con un nivel de mora relativamente bajo y una liquidez en dólares que está en niveles récord históricos, por arriba del 80%.
A diferencia de otros eventos del pasado, no tiene descalce de monedas. Todo es producto de adecuadas regulaciones prudenciales, pero también de una gestión profesional de los bancos. No obstante, es pequeño. El crédito representa apenas 10% del PBI, frente de más del 50% en la región y superiores al 100% en los países desarrollados. Más depósitos es mayor crédito. Y eso es más inversión, la única variable capaz de generar crecimiento y desarrollo sustentable de largo plazo, lo que el país requiere para estimular el empleo y reducir la pobreza.
- ¿Qué perspectivas ves con respecto al acuerdo con el FMI?
- Es deseable que Argentina y el FMI avancen en un acuerdo que permita al país equilibrar paulatinamente los desbalances económicos y alcanzar una senda de crecimiento sostenible en el tiempo. Es importante establecer políticas económicas consistentes que trasciendan los mandatos de los gobiernos, y que tiendan a la estabilidad. Ello permitirá a su vez ampliar el horizonte de planeamiento de los agentes económicos, favoreciendo la inversión y, por consiguiente, el desarrollo y la reducción de los niveles de pobreza.
- ¿Qué necesita el país para poder otorgar créditos de largo plazo?
- Es muy importante que el país vaya normalizando sus variables económicas, de manera que se vuelva a generar un entorno de confianza. Esto implica volver al equilibrio fiscal y generar el espacio necesario para que el sector privado invierta y genere empleo. En este contexto, es clave que Argentina además pueda reducir la incidencia del gasto, de manera que también pueda reducirse el peso de los impuestos. Argentina tiene que volver a crear el círculo virtuoso del ahorro, el crédito y la inversión.
- ¿Cómo los afectan los controles de cambio?
- Tienden a generar distorsiones en la toma de decisiones económicas. Más allá de las razones que hubo detrás de su imposición, hacia adelante es importante generar condiciones para restablecer la confianza en el país y permitir el desarme de estos.