Forbes Argentina
Apuestas, dados, juego (Pixabay)
Negocios

Adicción al juego en ascenso: estadísticas, regulación y el impacto de las apuestas online en Argentina

Nicolás Della Vecchia

Share

El crecimiento de las apuestas online enciende las alarmas en Argentina, donde cada vez más jóvenes se ven atrapados en la ludopatía. Estudios recientes revelan que una parte significativa de los apostadores participa con frecuencia, mientras la publicidad masiva y la accesibilidad tecnológica impulsan esta tendencia.

18 Febrero de 2025 06.50

Investigadores de la Universidad de California en San Diego identificaron un aumento importante en la cantidad de personas que buscan ayuda por adicción al juego. Según el estudio, esto se debe en gran medida a la proliferación de plataformas de apuestas deportivas online, una tendencia que se intensificó tras una decisión de la Corte Suprema de los Estados Unidos en 2018, que permitió a los estados regular esta actividad.

El análisis de tendencias de búsqueda en Google mostró que las consultas sobre "¿Soy adicto al juego?", aumentaron un 23% a nivel nacional entre 2018 y mediados de 2024. En algunos estados, como Ohio, Pensilvania y Massachusetts, el crecimiento alcanzó el 67%, 50% y 47%, respectivamente. Además, en Pensilvania, la introducción de casas de apuestas físicas generó un incremento del 33% en búsquedas relacionadas con la adicción al juego, mientras que la llegada de plataformas online elevó esa cifra al 61%.

Pero este fenómeno está lejos de ser exclusivo de Estados Unidos. En Argentina, esta problemática también está dejando su huella. 

La situación en Argentina: estadísticas y factores de riesgo

En la Argentina, el auge de las apuestas deportivas también tuvo un impacto en el crecimiento de la ludopatía, especialmente entre los jóvenes. Según datos del Observatorio de Adicciones y Consumos Problemáticos de la Defensoría del Pueblo bonaerense, el 8,29% de los argentinos realizó apuestas online en algún momento de su vida. En el grupo etario de 15 a 24 años, esta cifra asciende al 12,5%, y en el segmento de 25 a 34 años, al 15,5%.

El informe también revela que el 41,2% de los apostadores elige el fútbol como su principal opción de juego, seguido de los bingos (37%) y el boxeo (16,8%)

Uno de los factores que contribuyeron al aumento de esta problemática es la accesibilidad tecnológica. La conectividad y el uso masivo de dispositivos facilitaron la participación en juegos de azar desde cualquier lugar. Además, la publicidad de casas de apuestas también de manera exponencial. El 28% de los equipos de Primera División del fútbol argentino llevan en sus camisetas el patrocinio de alguna casa de apuestas, lo que normaliza la actividad y la hace más atractiva para los jóvenes.

A diferencia de Argentina, en las principales ligas europeas se ha prohibido que las casas de apuestas patrocinen a los equipos o competiciones.

Una encuesta de UNICEF Argentina y Bienestar Digital en 2024 mostró que el 40% de los adolescentes y jóvenes entrevistados había apostado online al menos una vez. Dentro de este grupo, el 37% lo hace de manera frecuente o diaria. 

Regulación y percepción del riesgo

El crecimiento del juego online también está ligado a la motivación económica. Más del 50% de los jóvenes encuestados afirmó que su principal razón para apostar es ganar dinero. Sin embargo, según datos del informe "Apostar no es juego", el 75% de ellos reconoce que las apuestas pueden convertirse en una adicción y el 70% considera que esta práctica tiene efectos negativos en la juventud

Un estudio de la Universidad Nacional de Córdoba reveló que el 16% de los jóvenes que apuestan online experimentaron problemas personales o sociales debido a esta actividad, mientras que el 22% presenta signos de riesgo que podrían derivar en complicaciones mayores.

Otro aspecto a considerar es el diseño de las plataformas de apuestas, que utilizan estrategias psicológicas para retener a los jugadores. Estas estrategias incluyen el uso de algoritmos que personalizan promociones según los hábitos de juego de cada usuario, impulsándolos a seguir apostando.

Bonificaciones, notificaciones constantes y promesas de "dinero fácil" contribuyen a mantener a los usuarios activos en el juego. De hecho, el 78% de los jóvenes que apuestan online recibieron ofertas de "bonos gratis" para seguir participando, según un estudio de la Universidad Nacional de Córdoba.

En la Argentina, las apuestas online están bajo regulación local, ya que no existe una ley nacional que las controle. En cambio, cada provincia establece sus propias normativas y requisitos para operar en el sector.

Según Chequeado, hay 17 provincias que ya cuentan con legislación local que permite el juego online (y, dentro de su marco regulatorio, la apuesta deportiva propiamente dicha): la Provincia de Buenos Aires, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Chaco, Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, Formosa, Jujuy, La Pampa, Mendoza, Misiones, Neuquén, Río Negro, San Luis, Santa Cruz, Santa Fe y Tucumán.

Pero el auge de esta problemática impulsó medidas legislativas en Argentina. En noviembre de 2024, la Cámara de Diputados otorgó media sanción a un proyecto de ley para prevenir la ludopatía y regular el juego online. La iniciativa prohíbe la publicidad y patrocinio de juegos de azar en medios de comunicación y eventos deportivos, y también impone verificaciones biométricas para restringir el acceso de menores de edad a estas plataformas.

Pese a estos avances, la ley aún no fue tratada en el Senado. El 12 de febrero de 2025, la Comisión Episcopal de Pastoral Social envió una carta a la vicepresidenta y presidenta del Senado, Victoria Villarruel, solicitando que el proyecto sea debatido con urgencia. Además, expertos advirtieron que la falta de regulación permite que los menores de edad accedan a las apuestas online usando cuentas de familiares o amigos mayores.

Mientras el debate sobre la regulación del juego online sigue pendiente, el impacto de las apuestas deportivas en la sociedad argentina se vuelve cada vez más evidente. El acceso irrestricto, la publicidad masiva y la crisis económica continúan siendo factores determinantes en la expansión de una problemática que afecta principalmente a los sectores más jóvenes de la población.

10