Misión: océano perpetuo
El mundo tiene la oportunidad de restaurar la salud de los océanos después de décadas de fuerte declive. Pero para lograrlo es necesario unir esfuerzos. El proyecto Mission Blue, liderado por la legendaria exploradora de los mares y Testimonial Rolex desde 1982, Sylvia Earle, es un claro ejemplo de esto. Así, esta “misión” se convirtió en uno de los pilares de la iniciativa Perpetual Planet de Rolex, lanzada en 2019 para apoyar a exploradores en su compromiso de proteger el medioambiente.
El océano es un soporte clave de la vida en este planeta. Cubre 362 millones de km² de la Tierra. Hoy está amenazado por la sobrepesca, los residuos plásticos, la acidificación de las aguas y el cambio climático. “Creíamos que el mar era tan grande que no podríamos dañarlo. Nos equivocamos. Hemos dilapidado los tesoros de la naturaleza. Y dejamos el océano al borde del colapso. Pero hay esperanza”, enfatiza Earle.
La estrategia es empezar por sectores. Son los llamados Hope Spots: Mission Blue les da ese estatus a las áreas oceánicas que deben ser protegidas o en las cuales hay que aumentar la protección. Luego, se elabora un plan de conservación con las poblaciones locales, las organizaciones medioambientales y los gobiernos.
Cada uno es un lugar especial, identificado científicamente como vital para la salud de los océanos. Un ejemplo son Las Palaos, islas de Micronesia. “El 80% es ahora un refugio de paz para la fauna marina, y el resto se dedica a la pesca para alimentar a la población local”, detalla la experta.
Los esfuerzos también están puestos en reducir el impacto humano en el Golfo de California, los mares Egeo, Caribe y Caspio, proteger la vida salvaje en peligro en las islas Galápagos, Andamán y Canarias, explorar la gélida Antártida y sanar muchos otros atolones y arrecifes desprotegidos.
Héroe de las profundidades
Desde que se fundó en 2009, Mission Blue fusiona la ciencia internacional de vanguardia con organizaciones de conservación locales. Trabaja en más de 69 países para recuperar y proteger los entornos marinos. También concentra esfuerzos en comunicar sus avances y descubrimientos.
Con el apoyo de Rolex desde 2014, el número de Hope Spots pasó de 50 a más de 130. Earle contribuye a un movimiento global que pretende proteger un 30% de los océanos del mundo para el 2030. Actualmente solo el 8% de los océanos está protegido. “Los próximos 10 años determinarán lo que ocurrirá en los 10.000 años siguientes”, asegura la investigadora.
“A veces la gente me pregunta: '¿Cuáles son los mayores problemas a los que se enfrenta el océano?'. Resulta, por supuesto, lo que metemos y sacamos del mar, pero creo que el mayor problema es la ignorancia. La gente no sabe por qué tiene que preocuparse por los océanos. Y son la cuna de la vida en la Tierra. Les debemos nuestro asombro, amor y cuidado”, advierte Earle, también conocida como la “Reina de las profundidades”.
Durante más de siete décadas, esta pionera de la exploración de los mares convocó con astucia la atención del público. Consiguió proezas bajo el mar jamás alcanzadas, y con esas hazañas despabiló a la sociedad sobre los peligros que acechan el mar.
Sus logros inspiraron a nuevas generaciones de investigadores que buscan devolverle la salud al mar. Seis de los más destacados son presentados en el documental Perpetual Planet: Héroes de los océanos. Puede verse en la plataforma web www.rolex.org que reúne a la gran exploradora submarina junto con científicos de todo el mundo que ponen en marcha proyectos innovadores para proteger los ecosistemas de los océanos.
A lo largo de la hora que dura el documental producido por la Unidad Científica de BBC Studios, los expertos marinos muestran las soluciones que encontraron a los distintos problemas. La inglesa Emma Camp desarrolló viveros de coral en la Gran Barrera de Australia que podrían ayudar a la restauración de arrecifes vulnerables de todo el mundo. En la Antártida, Michel André usa las últimas tecnologías para proteger al océano de la contaminación acústica.
Transmitir a las poblaciones pesqueras de Perú que las mantarrayas no solo son importantes para el ecosistema, sino que también pueden transformarse en un atractivo turístico, es la gran misión de Kerstin Forberg. Un sofisticado sistema para identificar, monitorear y cuidar a cada ejemplar de tiburón ballena es el gran descubrimiento que implementa Brad Norman en su Australia natal y más allá. Sortean los fiordos de la Patagonia chilena unos mini sumergibles creados por Vreni Häussermann para encontrar especies de coral desconocidas y protegerlas. Todos ellos son Laureados de los Premios Rolex a la Iniciativa.
También participan del documental Angélique Pouponneau, quien representa un Mission Blue Hope Spot en las Seychelles, y Ghislain Bardout, cofundador y líder de las expediciones Under The Pole que Rolex apoya, responsable del desarrollo de una cápsula especial que permite a los científicos permanecer bajo el agua durante 72 horas y recopilar datos.
Los expertos comparten su placer por bucear en las profundidades, nadar junto a peces, delfines y ballenas. Saben que cuanta más gente tenga la posibilidad de sumergirse en sus expediciones, aunque sea detrás de la pantalla, más eficaces serán sus acciones.
“Cada uno de nosotros puede marcar la diferencia al inspirar a otros. Con pasión, curiosidad y esperanza, cualquiera puede cambiarlo todo. Podemos crear un planeta perpetuo para las generaciones venideras”, afirma Earle.
A partir de la sociedad con Mission Blue, Rolex refuerza la visión y el compromiso a largo plazo de Perpetual Planet. Colabora al ayudar a exploradores marinos motivados en cambiar el rumbo de las cosas y usar sus conocimientos con objetivos positivos. La idea es crear una suerte de efecto dominó: que sean cada vez más los que aspiren a lograr que los océanos sean perpetuos.