En respuesta al límite de precio del petróleo para exportaciones por parte del Grupo de los Siete (G7), Rusia podría reducir la producción entre 500.000 y 700.000 barriles por día, según las declaraciones del viceprimer ministro Alexander Novak.
“Estamos listos para reducir parcialmente nuestra producción a principios del próximo año”, dijo en diálogo con el canal de televisión Rossiya-24. A su vez, agregó que los volúmenes equivalen a aproximadamente el 5% o 6% de lo que Rusia actualmente se encuentra produciendo.
"Intentaremos encontrar algo en común con nuestras contrapartes para prevenir tales riesgos”, comentó Novak. “Pero en este momento preferimos correr el riesgo de un recorte de la producción que ceñirnos a la política de vender en línea con el umbral”, añadió.
En tanto, describió las posibles caídas de producción como “insignificantes”, aunque realmente un recorte de tal proporción podría restringir el mercado mundial del petróleo teniendo en cuenta que la demanda de China podría recuperarse por el levantamiento de los cierres.
El propio Novak, considerado el principal negociador de Moscú en la OPEP+ y el principal funcionario gubernamental de energía, sostuvo que Rusia no venderá su petróleo a compradores y naciones que apliquen el límite de precio establecido de US$ 60 por barril.
En sus declaraciones se indica que los productores rusos pueden desviar sus exportaciones a mercados competidores, incluido el de Asia, debido a que la energía del país todavía es muy demandada internacionalmente.
De acuerdo a las estimaciones de Novak, la producción de petróleo en Rusia para todo el 2022 será de 535 millones de toneladas, lo que equivale a 10,74 millones de barriles por día, contemplando una relación de 7,33 barriles por tonelada.