Hay cientos de ecologistas en todo el mundo que creen que el ecosistema bitcoin podría ayudar realmente a reducir las emisiones de carbono y aumentar la dependencia de las energías renovables. Las fuentes de energía renovable, como la eólica y la solar, proporcionan energía inconsistente a las redes en lugares como Texas.
La minería de bitcoins es una carga flexible, que permite a los mineros subir y bajar el ritmo de producción, a veces impredecible, de la energía eólica y solar.
Añadir mineros de bitcoin a la mezcla permite al sistema eléctrico almacenar energía y valor, además de fluctuar la minería de acuerdo con las demandas urbanas para mantener estable la red eléctrica. Y ésta es sólo una de las muchas razones por las que los ecologistas están pensando en el bitcoin en el Día de la Tierra 2023.
La mayoría de estos ecologistas conocedores de bitcoin no están hablando de un cambio a proof-of-stake, el sistema alternativo menos intensivo en energía que utiliza la red Ethereum. En su lugar, los usuarios de bitcoin creen que el mecanismo de minería actual de bitcoin, el proof-of-work, ofrece un potencial único para aumentar la dependencia de las energías renovables.
Por qué el PoW de Bitcoin requiere tanta energía
La red Bitcoin utiliza un mecanismo de consenso denominado PoW, en el que los ordenadores utilizan electricidad para resolver problemas criptográficos. El Índice Cambridge de Consumo de Electricidad de Bitcoin, en febrero de 2023, reveló que los expertos estiman que más de la mitad del consumo global de energía de bitcoin ya procede de fuentes renovables.
Aunque los críticos a menudo defenestran el uso de electricidad de PoW, es precisamente este mecanismo el que da a los mineros de bitcoin la capacidad de complementar los proyectos de energía renovable. Las máquinas mineras de bitcoin también son escalables y transportables, lo que permite a los operadores monetizar la energía desperdiciada y desaprovechada en la fuente, como la captura de gas metano.
A continuación, algunos ecologistas que están aprovechando la minería de bitcoin de formas únicas para ayudar a alcanzar objetivos medioambientales y de energía limpia.
El Inversor Climático
Daniel Batten es cofundador de CH4 Capital, que financia proyectos que reducen las emisiones de los basurales convirtiendo el metano expulsado en electricidad. Es inversor en tecnología climática desde 2018 y activista climático desde 1997. Las primeras opiniones de Batten sobre el bitcoin oscilaban entre el desinterés y el horror.
Tras agotar sus esfuerzos por minimizar su huella personal, Batten se dio cuenta de que la única métrica importante eran las emisiones. Esta chispa encendió su viaje al espacio bitcoin, al que atribuye el haberlo convertido en un activista climático aún más apasionado.
La investigación de Batten lo llevó finalmente a la ventilación del metano de los basurales, una fuente importante de emisiones globales. Su empresa ayuda ahora a los vertederos a aprovechar el metano para generar electricidad para la minería de bitcoins. Al transformar el gas en una fuente de ingresos, Batten es optimista y cree que la minería de bitcoin crecerá hasta convertirse en un arma formidable en su lucha contra el cambio climático.
El empresario de las energías renovables
Nathaniel Harmon y Michael Bennett son cofundadores de OceanBit, la empresa que desarrolla una técnica de Conversión de Energía Térmica Oceánica para utilizar la variación de temperatura del agua del océano para generar energía limpia. Harmon y Bennett crearon la empresa con la ayuda de amigos y familiares. El Departamento de Energía también les concedió una subvención. Harmon me dijo que su objetivo es empezar a recaudar fondos externos este año.
Harmon comenzó su viaje climático tras experimentar en primera persona el blanqueamiento de los arrecifes mientras trabajaba como instructor de submarinismo. Descubrió pronto el bitcoin, aprovechando el mercado alcista de 2013 para financiar varios másteres en la Universidad de Hawai en Manoa.
Ahora trabaja en una central eléctrica OTEC de 10 megavatios flotante con mineros de bitcoin. Los ingresos del bitcoin permitirán a las plataformas de OTEC lograr economías de escala, haciendo que la energía sea más asequible, una hazaña que no era posible con centrales oceánicas aisladas antes del bitcoin.
Harmon afirma que la plataforma minera también "secuestrará megatoneladas de carbono y creará una pesquería hiperproductiva en mar abierto". Es optimista en cuanto a que la OTEC es una solución con potencial para hacer rentable la minería de bitcoin sin aumentar las emisiones de carbono.
El Conector de Activos Climáticamente Positivos
Elliott David es el responsable de estrategia climática y asociaciones de la startup fintech llamada Protocolo Bitcoin Sostenible. El SBP incentiva a los mineros de bitcoin para que utilicen fuentes de energía limpia verificadas, alineándose con los inversores concienciados con el clima. David cree que, durante la próxima década, la minería de bitcoin será responsable de más desarrollo de energía limpia del que la red de bitcoin pueda consumir, transformando finalmente bitcoin en un “activo positivo para el clima”.
David me dijo que es optimista respecto a que las fuerzas del libre mercado serán el factor impulsor de la transición hacia la energía limpia. Teniendo todo esto en cuenta, los usuarios de bitcoin de todo el mundo están celebrando el Día de la Tierra investigando y experimentando con distintas formas de utilizar la minería de bitcoin para promover una transición masiva a fuentes de energía renovables y limpias.
El mecanismo PoW de Bitcoin también lo hace ideal para combinarlo con la energía hidroeléctrica, eólica y solar. Todos los científicos mencionados ven el bitcoin como un pilar fundamental de un futuro sostenible con menos emisiones de carbono.
"Si ellos [los mineros] están beneficiando al planeta, entonces deberían cobrar por ello", dijo David en una entrevista conmigo. "Cambiando la narrativa en torno al bitcoin, podemos liberar su potencial como una de las clases de activos climáticamente positivos más potentes del mundo".