El Banco Central de la República Argentina (BCRA) continúa desangrándose. Semana tras semana, salvo excepciones, las reservas caen y alcanzan nuevos niveles preocupantes, a tal punto que los ahorristas ya están comenzando a temer que "toquen" los depósitos.
Sin embargo, podría existir un último bote salvavidas: la soja. Desde el mínimo de noviembre de 2021 hasta la actualidad, el commodity se revalorizó un 30% en dólares. A día de hoy, cotiza a cerca de 1.528 centavos de dólar por bushel, lo que equivale a algo más de USD 560 dólares por tonelada.
De esta forma, la soja alcanza valores récord, ya que los precios actuales se acercan a los máximos históricos logrados en mayo de 2021, momento en el cual el mercado estaba completamente sorprendido de la sólida tendencia alcista de la materia prima.
Para la corredora de granos Granar, "las pérdidas en la cosecha de Brasil y la eventual merma en sus exportaciones fueron los principales fundamentos alcistas".
Por su parte, Tomás Rodríguez Zurro, analista en la Bolsa de Comercio de Rosario, expresó que "la suba estuvo impulsada por el mal clima en Sudamérica. Mientras avanza la cosecha en Brasil hubo un ajuste de las proyecciones".
"Se esperaba que el país más grande de Latinoamérica produzca 145 millones de toneladas que serán 130 millones", añadió el especialista, quien indicó que "esto llevará a que se incremente la demanda a Estados Unidos de todo el mundo".
Gracias al aumento en los precios de la oleaginosa, el BCRA puede suspirar, ya que el campo es el mayor proveedor de divisas del país. De acuerdo a informes de consultoras privadas, 7 de cada 10 dólares provienen de los productores agropecuarios.