El sacudón que generó el desplome de las Bolsas asiáticas impactó como una piedra en el lago: rápido, expansivo y con efecto inmediato. El arranque de semana vino cargado de señales que espantaron a los inversores. Rumores, desmentidas y posteos desde la cuenta de Donald Trump terminaron de sellar un lunes teñido de rojo en los mercados. Argentina, una vez más, sintió el temblor.
Durante la madrugada del lunes, los mercados del sudeste asiático operaron en baja. Apenas se instaló la versión de que Estados Unidos pausaría por tres meses la suba de aranceles a las importaciones (menos para China), algunos índices globales intentaron reaccionar. Pero la ilusión duró poco. La Casa Blanca salió a desmentirlo y el optimismo se evaporó. De inmediato, las acciones se desplomaron otra vez y los dólares alternativos en Argentina retomaron la escalada.
El temor a una guerra comercial global que golpee el crecimiento y recaliente la inflación puso en modo huida a los grandes fondos. Salieron de los mercados de riesgo, como el argentino, para refugiarse en activos considerados más seguros. El rebote de las acciones argentinas en Wall Street, que en la apertura llegaron a caer un 9%, logró achicarse al 6% con el correr de las horas. Pero el daño ya estaba hecho.
Los bonos soberanos argentinos profundizaron la baja, en sintonía con otros emergentes. El índice EMB que mide ese comportamiento retrocede 0,8%. En ese contexto, los Bonares muestran caídas de hasta 2,24% (AL29D) y los Globales recortan hasta un 5,68% (GD38D). La consecuencia directa se refleja en el riesgo país, que escala 35 unidades y llega a los 960 puntos básicos, el nivel más alto desde fines de octubre del año pasado.
En Buenos Aires, la Bolsa porteña alternó subas y bajas, pero terminó inclinándose hacia el terreno negativo. El S&P Merval retrocede 2,7% y cotiza en 2.051.650 unidades. Si se ajusta por el dólar contado con liquidación, representa unos US$1519, una caída del 3,6%. Desde los US$2388 que tocó el 9 de enero, el índice retrocedió 36% en dólares.
Los ADR argentinos también enfrentan una rueda volátil. Luego de hundirse hasta 12% el viernes, este lunes intentaron recuperarse con subas del 5% en la primera parte del día. Pero pasado el mediodía, volvió el rojo. Las acciones de Corporación América caen 5,1%, Pampa Energía baja 4,5%, Edenor pierde 4,3% y Loma Negra, 4,1%.
Mientras tanto, los dólares libres también se recalientan. El blue sube $30 y se vende a $1340, su valor más alto desde agosto. El dólar contado con liquidación aparece en $1340. En la primera parte de la jornada incluso tocó los $1389, un número que remite a julio del año pasado, cuando el Banco Central decidió intervenir para contener la presión sobre los dólares paralelos.
El impacto de la crisis global, las dudas sobre el rumbo de la economía estadounidense y la falta de definiciones locales componen un combo que complica el horizonte. La volatilidad vuelve a ser protagonista. Y esta vez, con todo el mundo mirando.