Jonatan Kon Oppel es un especialista en planificación financiera que trabaja en Cono Sur Investments. Además de asesorar a inversores, utiliza sus redes sociales para hacer docencia: recomienda inversiones pasivas y seguras, ofrece cursos gratuitos para aprender más sobre finanzas, y recalca la importancia de aprovechar el tiempo disponible.
En diálogo con Forbes Argentina, Kon Oppel, licenciado en Economía y Master en Finanzas, explica en qué consiste esa mirada: “El tiempo es el único recurso del que cada día tenemos un poco menos. Es bueno enfocarlo en las cosas más importantes como compartirlo con nuestra familia o amigos”.
Kon Oppel también es un trotamundos: vivió en Israel, Estados Unidos, Colombia y varias ciudades de la Argentina, por lo que tiene una mirada global sobre cómo las finanzas impactan en la vida de las personas.
—¿Por qué en Argentina la gente invierte menos en acciones o bonos que en otros países como Estados Unidos?
—En los últimos años se ha dado algo que por un lado fue bueno y por otro lado fue malo que es la democratización del acceso a las inversiones. Hoy en día es muy fácil invertir. Cualquier persona mirando un pequeño tutorial en Youtube, en internet o leyendo un blog, incluso entrando a la página web de varios agentes de bolsas, puede abrirse muy fácil una cuenta de inversión y hacer sus primeras inversiones: comprar una acción, un bono, hacer una caución. Pero si bien el acceso a los productos de inversión se hizo más fácil, muchas veces se deja de lado la importancia del asesoramiento en la elección de los instrumentos de inversión. Esto lleva a que muchas personas compren un activo financiero sin conocer sus riesgos, sin conocer la mejor forma de elegirlos de acuerdo a lo que quieren conseguir, de acuerdo a sus objetivos, o a su perfil de riesgo. En un ciclo bajista en el mercado, muchas veces la gente se asusta, pasa un muy mal momento y esto lleva a que después se alejen de este tipo de inversiones o que las juzguen como que son inseguras o que se parecen mucho a un casino o están libradas al azar.
—¿Qué son las inversiones pasivas y por qué las recomendás?
—Las inversiones pasivas son aquellas que no requieren de nuestro tiempo para mantenerlas. La más común es comprar una propiedad para alquilar. Una vez que la comprás, no tenés que hacer más que cobrar la renta o el alquiler y cada tanto mantenerla. Yo sugiero inversiones pasivas para la mayoría de las personas porque cuando las hacemos podemos invertir nuestro tiempo en algo que puede rendir mucho más: en nuestro trabajo, nuestra profesión principal, nuestra empresa. Esto hace que podamos ahorrar más y así hacer crecer nuestro patrimonio. En el caso de personas que no pueden acceder a un asesoramiento constante, les recomiendo aprender a invertir de forma independiente, pero que no tengan que hacer mucho para mantenerlas, simplemente transferir sus ahorros a esas cuentas de inversión e invertirlos de esa forma pensando en mediano y largo plazo y teniendo en claro cómo hacerlas. En el caso de personas que pueden acceder a asesoramiento, lo que se hace es un análisis del perfil y objetivos del inversor al principio, se define un conjunto de inversiones, y después cada dos o tres meses esta persona se reúne con su asesor y hace una revisión de sus inversiones y ahí el asesor sugiere o no hacer algún cambio. En todas las técnicas de inversión que requieren ocuparse más activamente de ellas, hacer análisis de acciones, de bonos en particular, estar comprando y vendiendo en el corto plazo, se ha visto que a la mayoría de las personas les genera muy malos resultados, ya sea perder mucho dinero o ganar muchísimo menos que haciendo inversiones de mediano y largo plazo.
—¿Por qué remarcás tanto el valor del tiempo?
—El tiempo es lo que permite que se dé lo que llamamos la magia del interés compuesto: para poder ganar más con nuestras inversiones necesitamos poder invertir cada vez más, para que esa base que invertimos sea cada vez mayor debemos mantener el dinero invertido en inversiones seguras que cada vez valgan más. Cuando nosotros nos dedicamos a una profesión o tenemos una empresa en un rubro en particular cada hora, día, mes de tiempo que dedicamos a esa profesión o a esa empresa en ese rubro en particular nos permite diferenciarnos mucho más, volvernos mucho más escasos en el mercado laboral o en esa industria y ser mucho mejor en lo que hacemos. Eso nos genera ingresos más altos que intentar diferenciarnos en algo que hacen miles de personas en todo el mundo, que compiten en un campo común como es el de los mercados financieros internacionales. Por un lado me enfoco en el tema del tiempo porque es mucho más rentable invertirlo en aquello en lo que nos especializamos. Y por otro lado porque el tiempo es el único recurso del que cada día tenemos un poco menos, entonces es bueno poder enfocarlo en las cosas más importantes como compartir tiempo con nuestra familia o amigos.
—Últimamente hubo varios casos de estafas, esquemas Ponzi como Generación Zoe por ejemplo, pero también hubo personas que invirtieron en criptomonedas porque querían hacerse millonarias de la noche a la mañana y también perdieron mucho dinero. ¿Qué les recomendás para que no les pase eso?
—Lo primero que les diría es que si en verdad su objetivo es ser millonarias que miren los datos sobre cómo llegó a ser millonaria la mayoría de las personas. No son personas que invirtieron en pequeñas cosas o en pequeños activos financieros y multiplicaron por millones de veces su valor, sino que la mayoría de los millonarios son profesionales que durante muchísimos años ahorraron gran parte de sus ingresos los invirtieron en forma conservadora, segura, y así lograron acumular más de un millón de dólares. Por otro lado, es mucho más rentable hacer inversiones seguras que valen cada vez más y nos permiten ganar un pequeño porcentaje, pero sobre un monto cada vez mayor, que correr el riesgo de perder el 40% o 50% de nuestro capital que es muy difícil de recuperar.
—En este contexto macroeconómico de Argentina tan incierto, tan volátil, en el cual la economía se está enfriando, el año que viene hay elecciones, y los agentes económicos no saben qué va a pasar, ¿en qué recomendás invertir?
—En general la mayoría de las personas tiene su trabajo o su empresa en un solo país. Sus ingresos dependen en gran parte de cómo le vaya a la macroeconomía local, cómo le vaya al sector donde trabaja, su industria, su empresa, la competencia que reciba. Teniendo tanto impacto en sus ingresos lo que pase en su país, en su industria y en su empresa, lo primero que le recomendaría es que sus ahorros no los invierta en ellos. La mayoría de las personas lo mejor que puede hacer es invertir diversificando muchas industrias y en todo el mundo en diferentes tipos de inversiones.