Carvana anunció el miércoles un acuerdo para reducir su deuda en más de 1.200 millones de dólares, lo que disparó el precio de las acciones de la empresa hasta un 40%, una cifra que marca una remontada desde el pésimo rendimiento de las acciones del concesionario de autos usados en 2022.
Las acciones de Carvana cerraron el miércoles con una subida de más del 40%, a 55,80 dólares, lo que supone un aumento de más del 1.000% con respecto a los 4,63 dólares que cotizaban a principios de año. Carvana va a recaudar 350 millones de dólares en nuevas acciones para amortizar parte de su deuda, de los que unos 125 millones procederán del multimillonario cofundador Ernest García III, CEO de la empresa.
La deuda: el gran problema de Carvana
La empresa, que tenía 6.540 millones de dólares de deuda a largo plazo a finales de junio, cree que la operación reducirá la deuda total del distribuidor y disminuirá los gastos de intereses en efectivo a corto plazo, según el director financiero Mark Jenkins.
Tanto el patrimonio neto de García como el de su padre, Ernest García II, aumentaron el miércoles en más de 1.000 millones de dólares acumulados. Estimamos el patrimonio neto de García III en 1.400 millones de dólares (483 millones más). Su padre, que también es accionista mayoritario de Carvana, tiene ahora un patrimonio neto estimado de 5.400 millones de dólares (846 millones más). Ambos multimillonarios vieron disminuir su patrimonio neto en al menos 4.000 millones de dólares de 2021 a 2022.
Un gran 2023 después de un pesado 2022
El repunte de Carvana en 2023 se produce después de un duro 2022 en el que las acciones de la empresa cayeron casi un 100%. En 2021, Carvana alcanzó un precio máximo histórico de 360,98 dólares, impulsada por su plataforma optimizada de compra y financiación de automóviles que se benefició de la pandemia de Covid-19, cuando los problemas de la cadena de suministro ralentizaron la producción de automóviles nuevos, mientras que los tipos de interés de los vehículos cayeron.
Desde entonces, Carvana se enfrentó a problemas de deuda y batallas legales que provocaron la caída de sus acciones. Daniel Bustamente, un antiguo operador de Wall Street que vio mucho éxito vendiendo Carvana en corto, dijo el año pasado que las acciones de la empresa "iban a cero".
*Con información de Forbes US