A cuatro días de que el lunes se diera a conocer que Telecom Argentina, está en proceso de quedarse con las operaciones locales de Telefónica por un monto de US$ 1.250 millones, la reacción del mercado, particularmente de los inversores de la compañía propiedad del Grupo Clarin y el fondo Fintech de David Martínez, quedó lejos de ser celebratoria. Aunque en las primeras horas tras el anuncio los inversores le dieron la bienvenida a la noticia con una suba mayor al 4% de su papel en Nueva York, con el correr de los días el impacto positivo no sólo se diluyó sino que se revirtió.
La suerte que corra la operación ante la resistencia que insinuó el Gobierno, que debe autorizar la compra a través de la Comisión de Nacional de Defensa de la Competencia y la respuesta de la CEO de Telefónica, Laura Abasolo contribuyeron a sumar dudas. La ejecutiva aseguró que la multinacional "ya no tiene activos en la Argentina" y que la venta ya está cobrada, por lo cual cualquier definición regulatoria ya no le compete.
Sin embargo, el proceso de recien comienza en Argentina ya que se trata de una ardua revisión para verificar que no se genere un monopolio. Fue el argumento inicial, al menos, del Gobierno a minutos del anuncio de Telefónica de España.
A través de la cuenta oficial de X, la Oficina del Presidente informó que se dará intervención al Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) y a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) "para evaluar si esta operación no constituye la formación de un monopolio".
El motivo sería que la compra de Telefónica Argentina por parte de Telecom Argentina dejaría aproximadamente el 70% de los servicios de telecomunicaciones "en manos de un sólo grupo económico", lo que "generaría un monopolio formado gracias a décadas de beneficios estatales que recibió dicha empresa".
Pese a eso, en respuesta inicial, la cotización de Telecom Argentina en la Bolsa de Valores de Nueva York avanzó un 4,4% durante la jornada del lunes en el marco de una jornada negativa para todos los ADRs argentinos, pero retrocedió un 2,6% el martes e hizo lo propio el miércoles mientras que en la rueda de ayer profundizó la caída hasta 4,5% para recortar esa caída en torno a 3,6 por ciento. Es que, más allá de las cuestiones "políticas", lo cierto es que los números que presenta la empresa argentina están ajustados. El volumen de deuda es la principal preocupación,
"La adquisición permitirá a Telecom expandir sus operaciones y mantenerse como líder indiscutido en el mercado de telecomunicaciones local. No obstante, habrá que seguir de cerca las resoluciones que tomen las autoridades de aplicación, que pueden implicar medidas correctivas en términos de pricing como hasta la necesidad de desinvertir", comentaron desde Portfolio Personal Inversiones.
"Cabe recordar que, en el pasado, las operaciones se dieron en un marco político ventajoso para el grupo, lo que difiere de la actualidad. Las presiones que pueda ejercer La Libertad Avanza podrían afectar la operación, aunque pareciera estar consumada dado que la compañía comenzará a operar como una de inmediato", añadieron, haciendo referencia a las adquisiciones de 2006 y 2017.
Por otra parte, la operación tiene un fuerte impacto en los números de la compañía. "Hasta septiembre de 2024, Telecom reportó una deuda neta de US$ 2.396 millones, equivalente a 2,2x EBITDA. Con la nueva deuda asumida para la compra de Telefónica Argentina, el pasivo total ascendería a US$ 3.641 millones, alcanzando una relación de 3,3x EBITDA, un nivel que, si bien aún dentro de lo manejable, roza lo prudente y podría condicionar aún más la situación financiera de una empresa que ya enfrentaba desafíos estructurales", aportó el análisis de Delphos Investments.
El lunes a primera hora de la tarde, la compañía española anunció el fin del proceso de búsqueda de comprador que llevó adelante J.P. Morgan. "Telefónica Hispanoamérica llegó a un acuerdo con Telecom Argentina para vender la totalidad de sus acciones en el El capital social de Telefónica Argentina. La transacción valorada en US$ 1.245 millones se inscribe en la estrategia del Grupo de reducir la exposición a la región y continuar operando de forma sostenible para construir valor para sus accionistas", comentaron desde la empresa española.
Por su parte, Telecom señaló que "continuará desarrollando la infraestructura digital del país e incrementará la cobertura de la banda ancha fija y móvil". Además, indicó que "se acelerará el despliegue de fibra óptica y el 5G".