Las acciones de Nike, el mayor fabricante de indumentaria deportiva del mundo, saltaron más de un 10% en la Bolsa de Nueva York tras su presentación de resultados financieros, los cuales alegraron al mercado.
Específicamente, la compañía registró ingresos por US$ 12.354 millones en el segundo trimestre del año fiscal 2025, cuando las expectativas de los analistas eran de US$ 12.130 millones. Frente al año anterior, hubo una caída del 9%.
Gran parte del total provino de las ventas en América del Norte (US$ 5.179 millones); Europa, Oriente Medio y África (US$ 3.303 millones); China (US$ 1.711 millones) y Asia Pacífico y América Latina (US$ 1.744 millones).
A su vez, por divisiones, la más importante fue Calzados (US$ 7.655 millones), a la cual le siguió Vestimenta (US$ 3.738 millones) y Equipamiento (US$ 544 millones).
En tanto, las ventas directas de Nike fueron de US$ 5.000 millones, mientras que las ventas mayoristas fueron de US$ 6.900 millones. Año a año, hubo caídas de 13% y 3%, respectivamente.
Por otra parte, Nike informó una ganancia neta de US$ 1.200 millones, lo que representa una baja interanual del 26%. No obstante, su beneficio por acción ajustado fue de US$ 0,78, frente al pronóstico medio del mercado de US$ 0,63.
"Estamos tomando medidas inmediatas para reposicionar nuestro negocio, de modo que podamos volver a generar valor a largo plazo para los accionistas. Nuestro equipo está listo para empezar y estoy seguro de que veremos más momentos en los que Nike vuelva a ser Nike", comentó Elliott Hill, nuevo presidente y director ejecutivo de la compañía.