Ni netas ni brutas, las reservas siguen sin subir a pesar de las fuertes compras del Banco Central
Desde los US$ 32.903 millones registrados en la primera semana del año, las reservas brutas se contrajeron alrededor de un 15% hasta los US$ 27.995 millones del viernes.

Desde el último trimestre del 2024, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) estuvo comprando una importante cantidad de dólares. Sin embargo, sus reservas no logran crecer contundentemente, al punto de que incluso retrocedieron en las últimas semanas y se alejan del récord alcanzado en enero.

Concretamente, desde los US$ 32.903 millones registrados en la primera semana del año, las reservas brutas se contrajeron alrededor de un 15% hasta los US$ 27.995 millones del viernes. En paralelo, en el mismo periodo, el organismo monetario comandado por Santiago Bausili adquirió aproximadamente US$ 3.500 millones en el mercado oficial de cambios.

De acuerdo a Tomás Ambrosetti, director de Guardian Capital, uno de los motivos detrás de esta situación es que una parte de los dólares comprados se está destinando a intervenir el tipo de cambio libre y a cumplir con pagos de deuda. Además, la liquidación del sector agropecuario fue menor a lo esperado, lo que limitó el flujo de divisas.

 

"Por otro lado, la estrategia cambiaria y el contexto financiero favorecieron el ingreso de dólares por vías alternativas, como préstamos privados, pero este margen no es ilimitado y podría agotarse en los próximos meses", añadió el ejecutivo.

Por su parte, el economista Adrián Moreno aclaró que las dificultades para acumular reservas, al menos en el arranque del año, eran esperables, "especialmente por el pago de deuda, como el vencimiento de US$ 4.500 millones en bonos que en su mayor parte están en poder del sector privado, luego otro desembolso al Fondo Monetario Internacional por US$ 620 millones, que también tuvo inmediatamente un impacto negativo".

Para el especialista, la situación no es alarmante por el momento, pero debe tenerse en cuenta cómo el Gobierno mantendrá de ahora en adelante la confianza de los agentes económicos de modo tal que "pueda asegurar una calma cambiaria sin necesidad de intervención en el mercado de cambios".

"En este sentido, si bien la acumulación de reservas es un aspecto positivo, la sostenibilidad de esta dinámica dependerá de factores como la evolución del comercio exterior, el tipo de cambio real y las decisiones de política monetaria", finalizó Ambrosetti.