Chevron, la compañía petrolera estadounidense que es una de las más importantes del mundo, acaba de publicar los balances trimestrales del último periodo de 2021, decepcionando a miles de analistas e inversores.
Según la información oficial, Chevron reportó ingresos por USD 48.130 millones, un monto un 9,6% superior a los USD 43.920 millones proyectados por los especialistas. Sin embargo, el beneficio por acción (EPS, por sus siglas en inglés) fue de USD 2,56, un 22,4% menos de lo estimado.
Lo sorprendente es que este "mal" resultado de Chevron se da en un escenario en el que el petróleo ha estado atravesando una sólida tendencia alcista. En el último año, el barril del commodity subió un 66%, mientras que acumula un crecimiento de más del 370% desde el mínimo de mayo de 2020.
Además, se reportó que la producción global de petróleo y gas de Chevron llegó a 3,12 millones de barriles por día durante los últimos tres meses del 2021, un 5% menos que hace un año.
Y por si esto fuera poco, en el negocio de producción de petróleo y gas, la empresa informó una ganancia operativa de USD 5.200 millones, cuando el consenso del mercado proyectaba, al menos, USD 6.600 millones.
Ante la presentación de resultados financieros, las acciones de Chevron cayeron un 5% en la jornada de hoy, aún en un contexto positivo para los mercados, los cuales se recuperaron ligeramente luego del castigo de los últimos días.
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