Las empresas productoras de alimentos salieron a cruzar al Gobierno por la renovación de Precios Justos y advirtieron que el tope de incrementos del 5% mensual durante 90 días será “insostenible”. Las firmas apuntaron por la suba de costos que dejó la última devaluación, las dificultades de acceso a divisas para importar, el incremento de la deuda comercial y la pérdida de competitividad del Programa de Incremento Exportador.

La Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (Copal) emitió este miércoles por la tarde un duro comunicado en el que criticaron los nuevos lineamientos del programa oficial de precios que impulsó el ministro de Economía y candidato presidencial, Sergio Massa. Los resultados no fueron los esperados, pero el equipo económico del Gobierno insiste con su continuidad en un contexto de alta inflación.

“El contexto se vuelve cada vez más complejo para los distintos sectores de la industria de alimentos y bebidas, los cuales se ven imposibilitados de continuar absorbiendo, como lo vienen haciendo hasta el momento, estos impactos y se ven en la necesidad de requerir de forma urgente a las autoridades, un espacio de diálogo efectivo que permita acordar mecanismos que arbitren sobre las posibilidades ciertas para la producción”, sostuvo Copal.

La entidad, que contiene agrupa a 14.500 empresas de 34 sectores y preside Daniel Funes de Rioja, manifestó que las firmas no pueden absorber el impacto de la devaluación del 22% que aplicó el Banco Central el lunes posterior a las PASO.

“Sólo en las últimas 3 semanas, los principales costos de producción han aumentado en promedio entre un 15% y 30%, frente al 5% de incremento de precios propuesto. También se proyectan paritarias por encima del 140%. Evidentemente, la política distorsiva en materia inflacionaria vuelve a generar presión sobre la industria de alimentos y bebidas, que con mucho esfuerzo ha sido el único actor de la cadena de valor en absorber el impacto de este flagelo, que lejos está de ser resuelto e impacta al conjunto de la sociedad”, remarcó la Copal.

La entidad también repasó las distintas dificultades que enfrenta el sector de las alimenticias para operar en el contexto actual: restricciones de acceso a divisas para pagar importaciones de insumos, bienes intermedios y finales; descalces financieros y el fuerte incremento de la deuda comercial, que acumuló un récord de US$34.000 millones según indicó la consultora Ecolatina.

“Todo esto pone en jaque las relaciones no solo comerciales, también las que se asocian en primer lugar a la producción”, añadieron. Además, Copal remarcó que la devaluación que llevó al dólar oficial mayorista a $350 hizo que los sectores adheridos al Programa de Incremento Exportador han dejado de acceder al “dólar agro” de $340 por la pérdida de competitividad.

El reclamo de Copal se sumó a la carta que envió el CEO de Amcham Argentina, Alejandro Díaz, al titular de Aduana y encargado de negociar con las empresas, Guillermo Michel. En el texto criticaron el sendero de 5% mensual para Precios Justos y repasaron el retraso de los aumentos desde que comenzó el programa.

En el escrito, la entidad que engloba a 701 empresas estadounidenses que operan en el país -entre las cuales figuran las principales marcas de consumo masivo como Coca Cola, Pepsi, Procter & Gamble y Unilever- argumentó que de noviembre de 2022 a julio 2023, el sendero de precios otorgado a las compañías fue de entre 25 y 30 puntos por debajo del IPC.

“Esto constituye una prueba cabal del compromiso para contribuir en la búsqueda de soluciones a los problemas de nuestra economía, pero, a su vez, ha debilitado la situación financiera y económica de las mismas”, aseguró Díaz.

“Además, esta situación se vio agravada con la reciente devaluación del 14 de agosto del 22%, la aplicación del Impuesto País del 7,5% (según decreto 377-2023) y el incremento de costos durante los últimos 3 meses, altamente por encima del aumento de precios considerado según el acuerdo que venció esta semana. De hecho, en las últimas dos semanas los costos de producción ponderados han aumentado entre un 15% y 32%, lo cual vuelve absolutamente inviable el primer aumento propuesto del 5%”, detalló el presidente de AmCham.

Asimismo, desde la cámara empresarial plantearon que, a futuro, hay elementos que no están siendo previstos y que excederán largamente el sendero de aumentos propuesto. “Habrá reapertura paritarias de camioneros al 140%, proveedores aumentando entre 25% y 30% y condicionando la entrega de la materia prima o el producto intermedio, para mencionar solo algunos condicionantes”, explicaron desde la cámara.

El equipo de Michel propuso a las Alimenticias una serie de beneficios como “zanahoria” para ingresar al acuerdo y cumplir las pautas. Entre esos incentivos se encuentran: 1) la suspensión del pago del impuesto PAIS a las importaciones; 2) la reducción a 0% en derechos de exportación para mercaderías comprendidas en posiciones arancelarias del Mercosur; 3) la suspensión de una resolución de AFIP, lo que les permite a empresas que tienen certificados de no percepción no sufrir percepciones impositivas de IVA o Ganancias y 4) la prórroga para vencimientos de impuestos a la seguridad social.

Por las últimas manifestaciones públicas, parece que el Gobierno deberá hacer un mayor esfuerzo para tentar a las compañías.