El rebote del mercado sigue durante el jueves gracias a la última tanda de datos que muestran una economía norteamericana más sana de lo que temían los inversores. Gracias a eso, los principales índices bursátiles revierten casi por completo las pérdidas de la brutal caída masiva de los primeros días de agosto.
El Dow Jones industrial subió 470 puntos, o un 1,2%, terminando la mañana, mientras que el índice S&P 500 ganó un 1,4% y el Nasdaq, centrado en la tecnología, repuntó un 2%.
El crecimiento se dio después de varios acontecimientos positivos antes de la apertura del jueves, como las ventas minoristas de julio en Estados Unidos (mucho más fuertes de lo previsto); las bajas solicitudes de subsidio por desempleo semanales en ese país, inferiores a lo esperado; y los sólidos beneficios de Walmart por ingresos, la mayor empresa pública norteamericana.
Se disipa el temor
“La explosión de las ventas minoristas debería poner fin a todo el pesimismo que se expresó a principios de este mes”, observó Chris Zaccarelli, director de inversiones de Independent Advisor Alliance.
El S&P va camino a su mejor semana desde noviembre, con un crecimiento superior al 3%.
Las escalofriantes pérdidas de hace unas semanas apenas son evidentes en los tres principales índices, con el S&P subiendo un 8% desde su mínimo del 5 de agosto, el Nasdaq subiendo un 11% y el Dow subiendo un 5% (cerca de 1900 puntos) desde sus mínimos de este mes. Entre los valores que más subieron el jueves se encuentran Walmart (las acciones subieron un 7%), Ulta Beauty (11%), Cisco (8%) y Amazon (4%).
Pese a la recuperación, las acciones siguen por debajo de sus máximos históricos de cierre alcanzados el mes pasado, con el Dow Jones aún en retroceso del 2%, el S&P del 3% y el Nasdaq del 6%. Aun así, ese retroceso es mucho mejor que las fuertes pérdidas que se produjeron hace unas semanas, cuando el Nasdaq se vio inmerso en una corrección de casi el 15%.
La caída se dio cuando los inversores se inquietaron por la posibilidad de una recesión, preocupación que alcanzó su punto álgido el 2 de agosto, cuando Estados Unidos registró un sorprendente aumento del desempleo hasta alcanzar la tasa más alta desde 2021.
Los datos de ventas minoristas y de solicitudes semanales de subsidio de desempleo son los últimos de una serie de datos económicos norteamericanos más alentadores, ya que unos mejores datos de inflación a principios de esta semana y la actualización de las solicitudes de subsidio de desempleo de la semana pasada provocaron fuertes rebotes de las acciones anteriormente.
Los tres índices siguen subiendo significativamente este año, y la rentabilidad del 15% del S&P está muy por encima de su media histórica de alrededor del 10%.
El restablecimiento de la fe en la economía y el rebote de las acciones probablemente signifiquen que la Reserva Federal se mostrará menos agresiva a la hora de recortar los tipos de interés, una noticia poco grata tanto para los posibles prestatarios como para los inversores en renta fija.
El mercado valora en sólo un 26% la probabilidad de un recorte de 50 puntos básicos en la reunión de septiembre de la Fed, por debajo del 85% del pasado lunes, según la herramienta FedWatch de CME. Y sólo 75 puntos básicos de recortes se cotizan como el escenario más probable para finales de año, por debajo de los 125 puntos básicos del lunes pasado.
Nota publicada en Forbes US.