Forbes Argentina
Refinería Campana
Money

La Refinería de Campana se consolida como una gran exportadora de combustibles a Paraguay

Fernando Heredia

Share

Es el polo más competitivo para abastecer al país vecino por su ubicación estratégica en plena hidrovía.

3 Junio de 2024 12.50

Por su condición mediterránea que le impide una salida directa al mar y el bajo calado en gran parte de la hidrovía, Paraguay tiene un enorme desafío para abastecerse de insumos claves como el combustible. Mientras que el costo logístico de un buque petrolero del Golfo de México al Río de la Plata cuesta alrededor de 2 dólares por barril, el camino hasta Asunción tiene un recargo de 4 a 5 dólares adicionales.

Por su cercanía geográfica, la Refinería de Campana es el proveedor natural de este mercado, una condición que se reforzó en los últimos meses a raíz de la caída de la demanda argentina que otorga mayores saldos exportables.

La baja de ventas que están sufriendo todas las petroleras locales a partir del incremento de precios y el retroceso de los salarios, terminó siendo una oportunidad para que Axion diversifique el destino de sus productos.

Actualmente, abastece el 40% del consumo de Paraguay de Nafta Virgen y de Gasolina Ron 91, con los cuales se hace un blend con etanol para elevar su octanaje y generar Nafta Súper.

A su vez, provee el 100% del Jet Fuel (combustible de aviación) usado por el país vecino, el 30% del Propano y Butano necesario para las garrafas de gas y se está comenzando a exportar gasoil de azufre ultra bajo.

“Hay una ventaja comparativa para vender a Paraguay y a Bolivia por la posición de Campana en la hidrovía comparado con otras refinerías. Son unos 15 días de navegación con barcazas, ya que no pueden entrar buques grandes por el bajo calado”, indicaron a Forbes fuentes del sector.

La ruta del petróleo

La planta de Campana recibe un 70% del crudo que procesa desde la cuenca del Golfo San Jorge (Chubut) por barco y un 30% desde Neuquén a través del sistema de oleoductos. 

En total, son unos 15 millones de litros por día, equivalentes al 15% de la capacidad instalada de refinación de toda la Argentina. En la refinería se separan los componentes y se logra una transformación a un 60% de gasoil, un 30% de naftas y un 10% de jet fuel, GLP y carbón de petróleo.

Gracias a la gran reforma que se hizo en los últimos años, la primera refinería de Sudamérica se convirtió en una de las más modernas y ahora permite un mayor procesamiento de combustibles de calidad.

En particular, la planta tuvo la visión estratégica de apostar al mercado de gasoil de bajo contenido de azufre que antes era importando en su gran mayoría. El auge de la transición energética y la mejora de rendimiento de camiones y maquinaria agrícola hizo que la proporción de vehículos que requieren gasoil grado 3 sea cada vez mayor.

Para adaptarse a este fenómeno es que se logró un incremento del 50% en la producción de combustibles limpios y una baja del 99,9% en emisiones de azufre, que hoy es de apenas 10 partes por millón, cuando la regulación permite hasta 350 partes por millón en el gasoil grado 3. 

Para llegar a cada estación de servicio, una parte del combustible producido se despacha en camiones desde la planta de Campana, que a menudo se comercializa con canje de granos, pero otra parte viaja en barco a 3 terminales para lograr una mejor distribución logística en diferentes puntos del país: San Lorenzo (Santa Fe), Puerto Galván (Bahía Blanca) y Caleta Paula (Santa Cruz).

10