A pesar de la pandemia y la crisis económica, el 2020 y el 2021 fueron grandes años para las acciones estadounidenses. En total, el S&P 500 subió un 15,7% y un 26,6%, respectivamente. Desde el mínimo de marzo de 2020, el crecimiento superó el 117%.
De todas formas, no todas las empresas salieron beneficiadas, ya que solo las grandes tecnológicas se revalorizaron de forma sorprendente. En el mismo periodo, muchas pequeñas compañías fueron duramente castigadas, creando atractivas oportunidades de inversión para el 2022.
Un informe para clientes de Morgan Stanley detalló que los inversores pueden “agregar un poco más de sabor” a la elección de activos este año porque habrá más alternativas que en los meses previos.
“Al entrar en 2022, la pregunta clave para los inversores es decidir si quieren quedarse con los ganadores relativos o es hora de empezar a pescar a los perdedores”, comentaron los analistas liderados por Michael Wilson.
“Si bien seguimos favoreciendo la inclinación defensiva de gran capitalización que ha estado funcionando, recomendamos crear una barra con acciones que ya han sido golpeadas, pero que ofrecen buenas perspectivas a una valoración razonable”, agregaron.
Para detectar oportunidades en acciones, no hay que dejarse llevar por los índices globales que tienen una alta ponderación de grandes tecnológicas, sino que hay que comenzar a buscar empresas que hayan caído bastante durante el 2020 y/o 2021 y analizar sus aspectos fundamentales.
De esta forma, los inversores podrán determinar su valor intrínseco y sus perspectivas futuras y concluir si las cotizaciones cayeron injustificadamente y es momento de comprar o si, por el contrario, las bajas tienen sentido y es mejor continuar alejados.
“A pesar del sesgo de calidad desde marzo de 2021, las empresas de valor de pequeña capitalización han superado a las empresas de crecimiento de pequeña capitalización en 25 puntos porcentuales”, escribieron los expertos de Morgan Stanley. “Ese es un alfa serio, y creemos que está relacionado con nuestra otra visión clave: la valoración es importante”, concluyeron.