La inteligencia artificial (IA) llegó para quedarse. De hecho, según los ejecutivos de Microsoft, la tecnología todavía tiene un largo camino por recorrer, por lo que seguirá dominando en 2025 tal como lo hizo durante este 2024.
Según Ashley Llorens, vicepresidente corporativo y director general de Microsoft Research, los modelos de IA pronto estarán en condiciones de gestionar tareas mucho más complejas que las de hoy en día.
"Lo que tenemos ahora es una IA que puede razonar mejor, que puede percibir el entorno de formas más sofisticadas", señaló Llorens en diálogo con Yahoo Finance. "Y eso significa que podremos delegar un conjunto más sofisticado de tareas a la IA para que las complete en nuestro nombre", agregó.
Básicamente, el experto hizo referencia a los famosos agentes de IA, aplicaciones autónomas o semiautónomas que realizan tareas específicas y son más capaces como los chatbots tradicionales como ChatGPT.
Un agente podría, por ejemplo, clasificar las solicitudes entrantes de los clientes o extraer información de las facturas y colocarla en una hoja de cálculo para realizar un seguimiento más sencillo de los gastos empresariales.
"Tenemos esta capacidad que llamamos 'conexiones de café'. Y es básicamente la idea de delego media hora de mi calendario cada semana a un sistema de inteligencia artificial que me dice con quién debería tener una charla de café desde cualquier parte de la organización", explicó Llorens.
Posteriormente, agregó que hay un proceso en segundo plano en el que la IA simula muchas conversaciones aleatorias entre personas, analiza el resultado para ver qué conversaciones son las más interesantes y luego usa eso para proponer temas.
Para Microsoft, la IA también se volverá cada vez más multimodal durante el próximo año, lo que ayudará a que interactúe de mejor forma con texto, imágenes y audio.
Además, la IA será más eficiente energéticamente gracias a las actualizaciones de hardware. La tecnológica afirma que en los próximos años los nuevos centros de datos "consumirán cero agua para refrigeración" y se centrarán en el uso de alternativas de acero y hormigón con bajo contenido de carbono.