La energía superaría al campo en 2025 y sería el principal motor del superávit comercial
La consultora ABECEB proyecta que la mitad de los dólares provendrían de esta industria gracias al boom de Vaca Muerta.

De ser uno de los rubros más deficitarios de la economía argentina hace sólo dos años, el sector energético se transformaría en el principal aportante del superávit comercial argentino en 2025, por encima del campo.

La consultora ABECEB proyecta que el 50% de los 14.000 a 15.000 millones de dólares que se espera tener de saldo positivo este año en materia comercial llegarían de la mano de la energía.

"En 2025, la balanza comercial energética de Argentina se estima en torno a los USD 7.000 millones, consolidando la reversión del déficit de 13 años registrada entre 2011 y 2023. Este resultado no solo representa un hito histórico, sino que también destaca el creciente aporte del sector energético a las divisas del país, fortaleciendo la macroeconomía y mejorando la competitividad externa", dice Fernando Bazán, economista senior de ABECEB, en diálogo con Forbes.

Por el lado de las exportaciones, el crecimiento se sustenta en una serie de obras de infraestructura y proyectos productivos que está encarando la industria y que están a punto de finalizarse.

"El crecimiento de las exportaciones de crudo será impulsado por la puesta en operación del proyecto Duplicar+ de Oldelval, que ampliará la capacidad a 540 mil barriles diarios, y la optimización del uso del sistema OTASA, con 110 mil barriles diarios", explica Bazán. 

Por su parte, el aporte del gas natural reduciría fuertemente las importaciones y dejaría un pequeño saldo exportable. "La Reversión del Gasoducto Norte reducirá la dependencia de importaciones de gas desde Bolivia, mientras que el Proyecto Fénix y la exportación de gas a Chile y Brasil consolidarán un superávit gasífero superior a los USD 1.000 millones", agrega el especialista. 

Si bien en la consultora subrayan que a nivel de ventas externas el campo seguiría en primer lugar y el sector energético quedaría relegado como tercer mayor complejo exportador, el neto con importaciones es lo que lo coloca al frente de la generación de dólares argentina.

En 2024, por ejemplo, el sector agropecuario tuvo que importar unos 3.200 millones de dólares de porotos de soja y unos 800 millones en diversos tipos de fertilizantes.

¿Qué pasó el año pasado?

El cierre del 2024 ya representó un hito histórico para la energía al totalizar un saldo positivo de 5.660 millones, con el cual aportó el 30% del superávit comercial de todo el país, que fue el mayor de su historia.

Se trata de la mejor balanza energética de los últimos 18 años. El petróleo representó más de la mitad de las exportaciones con 5.500 millones y un crecimiento del 40% para alcanzar el podio de los productos más vendidos de Argentina al mundo. El principal destino del crudo de Vaca Muerta fue Chile, seguido de Estados Unidos, Brasil y Europa. 

La caída de importaciones en torno al 50% fue clave para lograr este resultado. El gasoil acaparó la mayor compra de energéticos del 2024 con 1.088 millones (51% menos que en 2023). El GNL requirió una compra de 676 millones (-62%), el gas natural 586 millones (-33%) y la energía eléctrica 518 millones (-38%).

Para este año, no se esperan grandes mejoras en GNL, pero sí en gas natural que se reemplazaría casi en su totalidad y en derivados de petróleo como gasoil, nafta y fueloil, donde ABECEB proyecta un déficit de 750 millones de dólares.