En sólo dos meses, los tipos de cambio libres “se despertaron” y comenzaron a preocupar nuevamente al mercado, en especial porque la brecha contra el dólar oficial volvió a sobrepasar el 50%.
Hasta mediados de mayo, el dólar MEP cotizaba a alrededor de $1.065 por unidad, mientras que el CCL y el blue se negociaban a $1.100, aproximadamente. En ese momento, el dólar oficial tenía un precio de $885, por lo que la brecha estaba en torno al 24%.
No obstante, la situación pronto cambió, en especial en las últimas semanas. Hoy en día, tanto el MEP como el CCL valen $1.428, a la vez que el blue cerró la última jornada en $1.430. Así, la brecha se disparó hasta el 56%, un nivel no visto desde principios de febrero.
“En las últimas semanas, los dólares libres registraron un notable incremento, una tendencia que captó la atención del mercado. La principal causa de este ascenso es la baja en el costo de oportunidad, producto de la disminución de las tasas de interés”, comentó Martin D'Odorico, cofundador y director de Guardian Capital.
“La lógica detrás de este fenómeno radica en que, con tasas de interés más bajas, invertir en pesos se vuelve menos atractivo. Los inversores buscan refugio en activos más seguros o que puedan ofrecer mayores rendimientos, como el dólar. Esta dinámica generó una presión al alza en la cotización de los dólares libres, reflejando un desplazamiento hacia este tipo de activo en un contexto de incertidumbre económica”, añadió el especialista.
Si bien en términos nominales los dólares libres alcanzaron un nuevo récord, de cara al futuro el panorama podría ser más alentador. “En general, no estoy muy alcista para el dólar, como escenario de tendencia. Me da la impresión de que el recorrido al alza que puede tener el dólar es más bien limitado. Técnicamente, el movimiento me puede llevar a la zona de $1.500/$1.530, pero la verdad que no sé si lo va a hacer”, señaló Rubén Ullúa, experimentado analista técnico de mercados financieros.
“Creo que es un mercado de incertidumbre que estamos viviendo en un contexto global que tampoco apoya porque, indudablemente, el escenario de la devaluación en Brasil tiene su impacto en el inversor local. Así que yo te diría que en realidad veo un escenario de avance del dólar también limitado”, agregó.
El experto reiteró que, bajo su punto de vista, el precio del dólar podría estar acercándose a un techo importante en términos reales al que le seguiría un proceso de apreciación de la moneda local que se mantendría por, al menos, los próximos dos años.
Por su parte, D'Odorico detalló que hay que estar atentos al avance de la inflación por su estrecho vínculo con la política monetaria adoptada por el nuevo Gobierno. "El presidente afirmó en reiteradas ocasiones que el cepo cambiario comenzará a desarmarse cuando la inflación alcance niveles similares a los del crawling peg, es decir, alrededor del 2% mensual. En este contexto, es fundamental observar detenidamente el índice de inflación mensual, ya que una reducción significativa en la inflación podría ser la señal esperada para iniciar un proceso de flexibilización en el mercado cambiario”, concluyó.