Bitcoin fluctuando entre aproximadamente US$ 18.950 y US$ 19.650.00 desde principios de octubre, según revelan las cifras de TradingView. Los analistas destacaron varias variables clave que los cryptoinversores deberían observar en el futuro para mantenerse al tanto de los mercados de divisas digitales tradicionalmente volátiles.
Brett Sifling, asesor de inversiones de Gerber Kawasaki Wealth & Investment Management, enfatizó el papel clave que desempeñan los datos macroeconómicos. "La debilidad de los macromercados continúa pesando sobre los cryptomercados especulativos", afirmó.
Sifling también habló sobre la historia del mercado asociada con este mes, enfatizando que coincidió con caídas significativas. “A medida que nos acercamos a octubre, la estacionalidad de este mes se percibe como uno de los peores momentos del año para los inversores”, afirmó.
“Ya sea una expectativa psicológica o un fenómeno real, ha habido 5 caídas importantes a lo largo de la historia durante este mes (como el Lunes Negro)”, un día en el que el promedio industrial Dow Jones cayó más del 20 % en cuestión de horas.
Política del Banco Central de EE.UU.
Sifling habló sobre el importante papel que las presiones inflacionarias están jugando en el mercado al afectar la toma de decisiones de los funcionarios del Banco Central.
Estos formuladores de políticas subieron las tasas de interés de referencia varias veces este año en un esfuerzo por controlar los precios vertiginosos, con la Reserva Federal aumentando su tasa de fondos federales en 300 puntos básicos entre marzo y septiembre.
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Aumentar esta tasa de referencia ejerce una presión más amplia sobre los costos de los préstamos, lo que hace que los instrumentos financieros que devengan intereses produzcan mayores rendimientos y, por lo tanto, los haga más atractivos para los inversores, un desarrollo que podría restar valor a los activos de riesgo como las monedas digitales.
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“La inflación y las tasas están tratando de estabilizarse y es lo que la mayoría de los inversionistas están observando”, señaló Sifling.
"Si la inflación continúa empeorando y la Reserva Federal continúa aumentando las tasas, podríamos ver una caída continua en los activos de riesgo como Bitcoin".
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“Malas noticias son buenas noticias” para activos de riesgo, dice analista
Tim Enneking, director gerente de Digital Capital Management, también se refirió a tales movimientos de política, ofreciendo una visión diferente del asunto, prediciendo que la alta incidencia de aumentos de tasas del Banco Central podría estar disminuyendo a medida que las condiciones económicas se suavizan.
“Ahora estamos en la era de las 'malas noticias son buenas noticias'. La menor demanda, las ganancias decepcionantes, las menores ventas, ahora constituyen buenas noticias porque indican una caída de la inflación, lo que a su vez indica que el ajuste cuantitativo y las tasas de interés más altas pueden estar llegando a su fin”, afirmó.
Enneking se refirió a las últimas cifras del Institute for Supply Management, que mostraron que la actividad fabril cayó a su nivel más bajo en más de dos años en septiembre en Estados Unidos. Más específicamente, el PMI manufacturero de septiembre del ISM, que recopila datos de gerentes de compras en los EE.UU., cayó a 50,9, la cifra más modesta desde mayo de 2020, por debajo del 52,8 de agosto.
Si bien esta última cifra es otro ejemplo de datos económicos mediocres, Enneking señaló que coincidió con el movimiento alcista de los activos de riesgo ayer. El índice de referencia S&P 500, por ejemplo, subió aproximadamente un 2,6 %, mientras que el promedio industrial Dow Jones subió un 2,66 %, según Google Finance. El Nasdaq Composite, un índice de acciones de alta tecnología, ganó un 2,3%, según revelan cifras adicionales de Google Finance.
Bitcoin también experimentó algunas ganancias modestas, con un aumento cercano al 2%, según TradingView.
Impacto de la fortaleza del dólar
Varios analistas enfatizaron el efecto que estuvo teniendo el elevado dólar sobre los activos de riesgo global, incluidos bitcoin y las monedas digitales en general.
"En términos generales, parece haber una relación indirecta entre el índice del dólar estadounidense (DXY) y el mercado de activos digitales, donde un DXY bajista proporciona una criptografía más alcista", enfatizó el abogado de Internet Andrew Rossow.
La moneda de reserva mundial podría volverse aún más sólida si las condiciones económicas se debilitan, dijo Armando Aguilar, analista independiente de criptomonedas. “Si las condiciones continúan empeorando, podríamos ver a los inversores atesorando el dólar estadounidense y sacando capital del mercado, especialmente los activos de riesgo”, predijo.
“Si los inversionistas acumulan dólares estadounidenses, podemos ver que el índice del dólar continúe subiendo a medida que aumenta la demanda frente a otras monedas que hemos visto depreciarse”, señaló Aguilar. "Un dólar fuerte reduce el poder adquisitivo de los compradores internacionales de criptomonedas y esto podría tener un impacto negativo en BTC y en el mercado de criptomonedas en general".
Indicadores clave
Después de comentar sobre el papel crucial del dólar, el analista señaló varios otros desarrollos específicos que los inversores deberían observar en el futuro.
"Los inversores deben estar atentos al índice de codicia y miedo de BTC, que ha tenido una tendencia a la baja en las últimas semanas y ha tenido problemas para recuperarse más allá de los 40 puntos", afirmó. El índice antes mencionado, que cuantifica el sentimiento de los mercados de bitcoin, llegó hoy a 24, lo que indica un miedo extremo.
El 1 de octubre llegó a 20, lo que apunta a una aprensión aún mayor.
"Además, los inversores deben observar las entradas y salidas de BTC y otros activos", afirmó, y enfatizó que CoinShares proporciona informes periódicos sobre este mismo desarrollo. “Los inversores pueden medir cuánta demanda hay de activos digitales en una semana determinada y pueden usar estos datos junto con macrodatos globales para evaluar oportunidades de inversión”. Además, sugirió que los inversores controlen de cerca las tasas hipotecarias a 10 y 30 años, los informes de inflación, las cifras de desempleo y las decisiones de política monetaria de los funcionarios del Banco Central.
*Con información de Forbes US.
