El impuesto País triplicó su recaudación, pero aseguran que no alcanza para cumplir con la meta fiscal del FMI
De $65.539 millones en julio, se pasó a un ingreso de $211.902 millones en agosto por el incremento de esta alícuota y la devaluación. Los desafíos que complican llegar al déficit primario de 1,9% del PBI.

El impuesto País fue el gran protagonista de la recaudación de agosto al triplicar su volumen y aumentar su participación en los ingresos del Tesoro del 2% al 5%. Eso permitió que los ingresos totales (excluyendo extraordinarios) volvieran a crecer en términos reales después de 10 meses.

Para Econviews, “la suba de las alícuotas a importaciones de servicios, bienes y fletes (y la devaluación de 287 a 350) más que triplicó la recaudación, de $65.539 millones en julio a $211.902 millones en agosto. Los ingresos extra superaron los $125.000 millones que habíamos calculado a fines de julio”.

No obstante, aún muestran un retroceso real del 5,4% i.a. para el acumulado en los primeros ocho meses del año y las consultoras económicas anticipan que no se cumplirá con la meta de déficit primario del FMI del 1,9% del PBI.

“De cara a los últimos meses del 2023, vemos poco factible que el Gobierno contenga el rojo primario en la medida necesaria como para cumplir con la meta fiscal pactada con el FMI. La magnitud de dicho desvío dependerá no sólo de los incentivos político-electorales a expandir el Gasto Público, sino también del financiamiento neto obtenido en el mercado de deuda local”, afirma Ecolatina.

Respecto al primer punto, explican que el Tesoro está captando un financiamiento neto superior al esperado inicialmente (rollover del 205% en agosto y 238% en lo que va de septiembre), en parte justificado por las intervenciones del BCRA en el mercado secundario y la demanda cautiva de los bancos y otros.

En cuanto al gasto electoral, estimaron que “el paquete de medidas fiscales anunciadas en las últimas semanas (equivalentes a 1% del PIB) presionará sobre el Gasto Primario en la medida suficiente como para desviarse del sendero de consolidación fiscal”. 

Sergio Massa y Kristalina Georgieva en Washington

En este sentido, Equilibra subraya que las medidas del Palacio de Hacienda tras la devaluación post-PASO para recomponer los ingresos populares ya suma un gasto adicional de AR$ 2,4 billones (1,3% del PBI) para lo que resta de 2023. “Unos $1,5 billones (0,8% del PBI) se computarán como erogaciones sobre la línea, abultando el déficit primario del gobierno nacional”, indican. 

En consecuencia, la consultora espera que el rojo primario se ubique en torno de 2,8% del PBI (AR$ 5,0 billones) en todo el año, lo que implica que, entre septiembre y diciembre, ascendería a unos AR$ 2,7 billones (1,5% del PBI).

“El déficit primario acumulado trepó a $2.252 MM, dejando un margen de $83,7 MM para el cumplimiento de la meta acordada con el FMI para el tercer trimestre (- $2.335,7 MM). Difícil de cumplir, más considerando que el “Plan Platita” comenzará a verse reflejado -en parte- durante septiembre”, coinciden desde Inveq.

Para el 2024, Ecolatina proyecta que la normalización de la cosecha del agro permitiría un incremento del 0,8% del PIB en la recaudación por Derechos de Exportación, lo cual más que compensaría la reducción de otros ingresos.

Con relación a las erogaciones, el ajuste sobre el Gasto Primario recaería principalmente sobre el recorte en Subsidios Económicos: el gasto destinado al Transporte y la Energía sufriría una caída de 0,5% del PIB en 2024. Por su parte, se prevé un incremento en las Prestaciones de la Seguridad Social (jubilaciones y pensiones) en torno a 0,4% del PIB. De esta forma, las otras partidas del gasto sería las variables de ajuste para alcanzar el déficit primario del 0,9% del PIB el año próximo”, agregan.