Con la salida de la pandemia, el 2022 estuvo marcado por la explosión de los medios de pagos digitales. En la Argentina, las fintechs ofrecen desde tarjetas sin cargo, algunas incluso devuelven cashback en crypto, hasta aplicaciones y códigos QR para pagar de forma sencilla y rápida con el celular.
Este proceso está enmarcado en un contexto global donde los pagos digitales se imponen sobre el dinero en efectivo. De hecho, un informe de la consultora internacional Markets and Markets destaca que esta industria estará valuada en 180 mil millones de dólares para el 2026.
Sin embargo, dada la situación económica en el país, marcada por altos niveles de inflación y trabajo informal, este fenómeno aún no ha calado tan profundo como en otras sociedades. Esto se puede observar en un estudio realizado por Oh! Panel para Prosegur en el que se destaca que dos de cada tres comerciantes y pequeñas empresas en Argentina prefieren el efectivo como forma de pago. Además, ocho de cada diez lo consideran como fundamental para el desarrollo de su negocio y la gran mayoría, como el método más inclusivo, seguro y económico.
El efectivo sigue imponiéndose en la Argentina
Entre los resultados más importantes, se destaca la percepción de los comerciantes sobre la importancia del dinero en efectivo para el desarrollo de sus negocios, no sólo por ser elegido como el preferido por sus consumidores, sino también por considerarlo como el más económico e inclusivo.
De hecho, para el 84% de los encuestados el efectivo es el medio de pago más utilizado. Le siguen las billeteras virtuales (64%) y las tarjetas de débito (59%). Y el 64% destacó que prefiere cobrar sus ventas de ese modo a otro tipo de pagos.
Comparación con países de la región
El estudio, que tiene por objetivo entender la percepción de los comercios minoristas y pequeñas empresas sobre el rol de los distintos medios de pago para la gestión de su negocio, fue realizado en simultáneo en Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay, entre empresas de distintos rubros y ciudades.
En tres de los cuatro países relevados el efectivo ocupa el primer puesto entre los métodos de pago utilizados. Pero en la comparación por nación, Argentina se ubica en el segundo lugar en cuanto al uso de efectivo, sólo detrás de Paraguay, mercado en que el 91% aseguró que es el medio de pago más elegido. Además, en los cuatro países el efectivo es la forma de pago más valorada por los comerciantes: Uruguay (83%), Chile (77%), Paraguay (66%) y Argentina (64%).
En la Argentina, se destaca la preferencia de utilizar dinero en efectivo por estar exceptuado del cobro de comisiones y también por las demoras en los tiempos de acreditación de otros métodos, como las tarjetas de débito o crédito. Por eso, el 74% de los entrevistados considera al pago con billete el medio más económico, y el 36%, como el más seguro. Asimismo, el 41% de los comercios y Pymes declaran que, del total de sus ventas, más del 50% son realizadas en efectivo.
Por qué no se eligen los pagos digitales
Los encuestados también consignaron las razones por las cuales no prefieren los pagos electrónicos o con tarjetas: el principal, destacado por el 47% del total, es el mal funcionamiento frecuente del sistema, problema que le hizo perder dinero o ventas al 76% de las empresas consultadas. Además, al 77% le preocupa la posibilidad de ser víctima de delitos electrónicos y otro 64% afirma que pierde dinero o ventas si el pago se efectúa con tarjeta de crédito.
Por otro lado, se destaca que el efectivo es el modo de pago más inclusivo en comparación a otras formas de pago. Esto es reconocido por el 72% de los encuestados, quienes creen que su uso permite incluir a todos los sectores de la población, sobre todo a personas mayores y jóvenes, pero también incluso a niños que habitualmente no utilizan otros medios de pago. Seis de cada diez (61%) comercios y pymes sostienen, además, que prefieren el efectivo porque les facilita el control de caja diario.
Los resultados obtenidos por el estudio demuestran que la mayoría de los comercios y Pymes prefieren contar con billetes y que la existencia y crecimiento de otros medios de pago no reemplaza al efectivo, por ser el medio de pago más directo, sencillo, sin comisiones, seguro e inclusivo, además de no depender de factores tecnológicos.