El Cedear que pocos miran y aumentó un 42% durante el 2024
Las acciones de esta entidad bancaria fueron impulsadas por expectativas de desregulación y recortes fiscales tras el triunfo de Trump.

Las acciones de Bank of America (NYSE: BAC) registraron un incremento del 42% en lo que va del año, en comparación con el alza del 25% del índice S&P 500 durante el mismo período. Mientras tanto, Wells Fargo (NYSE: WFC), uno de sus principales competidores, mostró un desempeño aún más sólido, con un aumento del 54% en lo que va del año. Actualmente, con un precio de US$ 46 por acción, BAC cotiza cerca de la valuación estimada por Trefis.  

Gran parte de estas ganancias recientes se atribuyen al resultado de las elecciones en Estados Unidos, que otorgaron a Donald Trump un segundo mandato como presidente. Los inversores confían en que la administración Trump favorecerá una política de desregulación, lo que podría traducirse en una supervisión más laxa para los bancos en comparación con la administración de Biden

Esto podría beneficiar al sector financiero al incrementar los volúmenes de operaciones, potenciar la actividad crediticia y reducir los costos de cumplimiento normativo, mejorando así la rentabilidad. Además, el respaldo de Trump a los recortes fiscales impactaría positivamente en las utilidades de bancos como Bank of America.  Por otro lado, el control republicano del Senado y su avance hacia una mayoría en la Cámara de Representantes también se perciben como señales positivas para el sector bancario, dado el enfoque promercado característico del partido.  

Las acciones de Bank of America (NYSE: BAC) registraron un incremento del 42% en lo que va del año.

Aunque las acciones de BAC tuvieron un buen desempeño en 2024, su evolución en los últimos cuatro años fue irregular. El rendimiento anual alcanzó un 50% en 2021, cayó un 24% en 2022 y creció un modesto 5% en 2023. En este contexto macroeconómico incierto, marcado por recortes en las tasas de interés y tensiones geopolíticas, surge la pregunta: ¿podrá BAC evitar un desempeño como el de 2022 y 2023, o mostrará un salto significativo en los próximos 12 meses?  

Bank of America superó las expectativas del mercado en el tercer trimestre del año fiscal 2024. Los ingresos totales fueron de US$ 25.300 millones, una cifra prácticamente estable frente al año pasado. Sin embargo, las ganancias netas cayeron un 12% interanual, situándose en US$ 6.900 millones, debido a mayores provisiones para pérdidas crediticias.  

El ingreso por intereses netos (NII) quedó presionado por el aumento de las tasas de interés, lo que resultó en pagos más altos sobre los depósitos y en una menor demanda de préstamos, dado que el financiamiento encareció para los clientes. A pesar de esto, la compañía experimentó un crecimiento sólido en sus divisiones de asesoramiento y operaciones bursátiles.  

Los ingresos por operaciones de renta fija aumentaron un 8% interanual, impulsados por una mayor actividad relacionada con divisas y tasas de interés, mientras que los ingresos de renta variable crecieron un 18%, favorecidos por un incremento en los volúmenes de operaciones en efectivo y derivados. Asimismo, los ingresos de gestión de patrimonios e inversiones subieron un 8% interanual, alcanzando US$ 5.800 millones, gracias a una mejora en la valorización de los mercados y un aumento en los flujos de clientes.  

El rendimiento anual de Bank of America alcanzó un 50% en 2021, cayó un 24% en 2022 y creció un modesto 5% en 2023.

Mirando hacia adelante, el panorama podría mejorar para Bank of America. El recorte en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal, iniciado en septiembre, favorece un repunte en los ingresos por intereses netos durante el cuarto trimestre. Este crecimiento ya comenzó a notarse en el desempeño del tercer trimestre, lo que sugiere que un cambio positivo está en curso.  

Además, una menor incertidumbre política tras las elecciones y tasas de interés más bajas estimulan la actividad en banca de inversión. Esto incluye un posible aumento en las emisiones de deuda y capital, así como una mayor actividad en fusiones y adquisiciones (M&A).  

Aunque persisten desafíos en el horizonte, las señales de recuperación en ingresos clave y la posibilidad de un entorno regulatorio más favorable colocan a Bank of America en una posición interesante para los inversores. El desempeño futuro dependerá de su capacidad para navegar los cambios económicos y aprovechar las oportunidades que se presenten en este nuevo contexto.  

*Con información de Forbes US.