Sin acceso al crédito internacional, Argentina se recostó en la banca multilateral para financiar proyectos de infraestructura. Una de las organizaciones que desembarcó con la billetera abierta y un creciente ímpetu es el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE). En los últimos dos años desembolsó créditos por 380 millones de dólares para financiar desde la construcción del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad hasta proyectos de investigación en ciencia y tecnología.
Argentina es miembro extra regional del BCIE, por lo que accedió a su financiamiento, cuyo cupo es de 800 millones de dólares. El secreto más celosamente guardado del BCIE es su calificación crediticia: AA. “Las condiciones de nuestros créditos son muy beneficiosas porque somos un banco muy bien calificado. Somos el banco mejor calificado de la región. Nuestra aspiración en los próximos años es ir hacia la AAA, que es la mejor calificación global”, reveló a Forbes Argentina Maximiliano Alonso, director de la entidad para Argentina y Colombia.
Alonso visitó esta semana Buenos Aires, donde se reunió con el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz, y con el ministro de Agricultura, Julián Domínguez, entre otros funcionarios.
-¿Qué proyectos está desarrollando el Banco Centroamericano en Argentina?
-Hace 26 años que está Argentina en el Banco como socio. Y en esos años desarrolló sólo dos créditos. Hubo muy poquita actividad. En estos últimos dos años logramos consolidar ocho créditos en Argentina. Es un crecimiento abrupto, en pandemia, ha habido un trabajo muy fuerte de posicionamiento.
-¿Ese cambio sucedió porque antes el Estado argentino no pedía financiamiento y ahora sí o por una decisión del Banco de volcarse más al país?
-Las dos cosas. No había una mirada sobre Centroamérica, no había una participación de desarrollo e integración con la región. Y si no hay un estímulo de un lado, tampoco lo hay del otro. El Banco fue cambiando esa perspectiva en función de la dinámica que le impuso Argentina en estos últimos dos años, porque queremos no sólo cooperar, sino ampliar los mercados hacia lugares que sean complementarios. De una cartera muy chica, casi nula, generamos proyectos por 380 millones de dólares, de los cuales 80 millones son desembolsos este año. Los ocho proyectos no tienen que ver con la infraestructura dura sino con un nuevo modelo de desarrollo. Las multilaterales siempre invierten en infraestructura, en casas, en escuelas, en fierros si se quiere, pero han descuidado el software del desarrollo. Tenemos un crédito de diversidad de género y de equidad, una cosa muy novedosa para una multilateral. También tenemos un crédito en Ciencia y Tecnología. Se van a financiar muchos proyectos de investigación, 200 becas de doctorado y de maestría para que centroamericanos vengan a estudiar acá. Cuando esa gente de Centroamérica vuelva a su país, tendrá una relación muy importante con Argentina. Así se construyen los procesos de cohesión social, de integración regional, de desarrollo comercial. También tenemos un crédito sub soberano con la provincia de Jujuy para infraestructura educativa, y otro vinculado al Covid-19, que apunta a la creación de módulos de salud en los centros penitenciarios y en fronteras.
-¿Cuáles son las condiciones de esos créditos: a qué tasa y con qué plazo?
-Las condiciones son muy beneficiosas porque somos un Banco muy bien calificado, el mejor de la región. Somos AA. Los créditos son con tasas diferenciadas. Lo que tenés es una posibilidad de cinco años de gracia, por ejemplo. Regularmente los proyectos son de tres o cuatro años, terminás el proyecto y recién lo empezás a pagar. Respecto a las tasas, si es un crédito de emergencia son de 1,5 puntos. Es muy bajita, no la conseguís casi en ningún mercado internacional. Creo que la más alta que hemos dado es de 4 puntos, más Libor suma medio punto más. Siempre me preguntan por qué Argentina, si Argentina siempre está con problemas. Para nosotros es un valor apostar por Argentina. Estamos ampliando la cartera, no la ponemos toda en Centroamérica en tres, cuatro o cinco países, sino que empezamos a ampliarla y eso nos da mejor rating. Es una cuestión técnica de calificación.
-Hasta ahora concedieron créditos por 380 millones de dólares de crédito. ¿Hasta qué cupo planean ampliarlo?
-Los cupos en los bancos multilaterales se otorgan en función de los porcentajes que tenés de participación. En ocho años vamos a tener un cupo aproximado de 800 millones de dólares y eso lo vamos a ejecutar. Tenemos la posibilidad de ampliar eso con crédito al sector privado. Hemos visitado distintos clientes que vamos a tener, estamos hablando con bancos comerciales y estatales, entre ellos el BICE y el Banco Nación, para que generen una línea de crédito con nosotros y distribuyan los fondos. Hemos venido a no ser un banco testimonial en la Argentina. Queremos ser un banco muy posicionado.
-Si Argentina no logra un acuerdo con el FMI, ¿se caen estos créditos?
-No, para nada. Argentina es dueño del banco y sin tener acuerdo en este momento está cumpliendo con el banco y con las cuotas. No se cae nada. El acuerdo con el FMI es algo que maneja el Gobierno de Argentina, no tiene una relación directa con nosotros. Pero me parece que debería haber un acuerdo en buenas condiciones, que sirva para apalancar el crecimiento y no la especulación, que sirva para que las pequeñas y medianas empresas puedan generar trabajo. Quizás con otras instituciones si no llegás a un acuerdo vas a tener problemas, pero con la nuestra no, estamos a disposición. Estamos apostando por Argentina.
-¿Qué riesgos hay de que estas líneas de créditos del banco se interrumpan si hay un cambio de gobierno en Argentina?
- No me podría imaginar que no se sigan estas cuestiones que benefician a Argentina. Si me preguntas a mí, si asumiera un gobierno de otro signo político, yo seguiría con esta política porque otorga acceso a financiamiento muy barato. Argentina no lo tiene en este momento. No podés perder esta oportunidad con las multilaterales. Yo creo que van a seguir estas políticas, sobre todo para abrir nuevos mercados.
-¿Qué le puede dar Argentina en materia de cooperación a la región centroamericana? ¿Se evalúan acuerdos en materia agrícola?
-Justamente tuvimos una actividad en Casa Rosada para empezar a ver mecanismos de cooperación en términos agrícolas. Desde la tecnología, el know how, la experiencia en la producción, la apertura comercial, hasta mecanismos de cadenas de valor, Argentina es top a nivel mundial en temas agrícolas. El Banco es uno de los vehículos de soporte más fuerte de la región, entonces que esté en el medio es garantía de que las cosas en Centroamérica también se harán. Vamos a estimular que haya mucho más comercio con Centroamérica, que el agro comercie más, y que los centroamericanos también lo hagan acá. No es una cuestión de una sola vía, sino de dos vías.