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Efecto Milei: cuáles son las industrias más golpeadas desde la devaluación

Carlos Boyadjian

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Construcción e industrias vinculadas, junto a ramas de actividad orientadas al mercado interno, como alimentos, textiles, calzados, químicos, muebles, e industrias metálicas, son los más perjudicados.

3 Marzo de 2024 09.10

Luego dos años de recuperación post pandemia, la industria manufacturera cerró un 2023 con números en rojo y en línea con los niveles de actividad durante la vigencia de las restricciones por el Covid-19. Este retroceso comenzó a evidenciarse en la segunda mitad del año, pero se profundizó de manera dramática a partir de diciembre, tras la devaluación del peso del 54%, que decidió el gobierno de Javier Milei a sólo 48 horas de asumir.

Tanto datos oficiales como relevamientos privados dan cuenta de este importante deterioro de los datos industriales, con caídas en términos anuales y en la medición desestacionalizada respecto del mes anterior. Y las perspectivas para este año no son buenas.

Recién en 2025 podría verse luz al final del túnel y cierta recuperación de los niveles logrados en 2022. El índice de Producción Industrial (IPI) que elabora el Indec, midió para diciembre un derrumbe del -12,8% en comparación al mismo mes del año anterior, y de -1,8% en el acumulado de todo el año, llegando a caer -5,4% en términos desestacionalizados en diciembre de 2023.

Los datos oficiales de enero 2024 recién se conocerán la próxima semana, pero las primeras proyecciones privadas alertan sobre un deterioro de la situación en el arranque del año.

De acuerdo al relevamiento mensual de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL) en enero “la producción industrial registró una contracción interanual del -6,3%, con caídas generalizadas de actividad que alcanzaron a los sectores de alimentos y bebidas, textiles, químicos y plásticos, minerales no metálicos, industria metalmecánica e industria automotriz”.

Y agrega: “En términos de perspectivas de corto plazo, la industria a comienzos de 2024 transita un período de adecuación al nuevo escenario económico, caracterizado por un marcado cambio de precios relativos de bienes y servicios un fuerte deterioro del poder de compra del público y mayores incentivos a la exportación”.

Salida exportadora

Uno de los sectores que podría aprovechar esta veta es el automotor, pero hay que recordar que recién está encontrando un cauce la deuda con importadores por falta de dólares y el mercado interno se desplomó, en medio del ajuste al bolsillo y la disparada de la inflación. Según ACARA, la entidad que nuclea a concesionarios de Autos y motos, en enero-febrero de 2024 el patentamiento de autos cayó -27,4% versus 2023, unos 22.000 vehículos menos.

Desde el Estudio Orlando Ferreres y Asociados coinciden en remarcar el momento complejo del sector manufacturero. “En el primer mes del año, tanto la fabricación de automóviles como la producción de metales básicos y minerales no metálicos (cemento) evidenciaron bajas de dos dígitos, aunque la elaboración de aceites rebotó 13,5% interanual”.

En este contexto, advirtió que “las perspectivas para el 2024 no son alentadoras”. Aunque se verán mejoras en los rubros vinculados al agro, que moderarán la caída de otros sectores, “el resto de las líneas de producción se verán afectadas negativamente por la caída del ingreso real y los cambios de precios relativos”.

Según el Indec en el mapeo general de sectores en diciembre lideraron las bajas Otros equipos, aparatos e insumos (-42,2% interanual), Maquinaria y equipos (-36,3%), Muebles y colchones (-26,6%), Industrias metálicas básicas, donde pesan mucho acero y aluminio (-25,4%), Productos de metal (-16,2%), e Indumentaria y calzado (-13,1%). Incluso un rubro de primera necesidad como Alimentos y bebidas tuvo un retroceso de -7,8% interanual.

Construcción
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Industriales ven todo rojo

Por su parte, la Unión Industrial Argentina (UIA) indica que las 12 ramas de actividad analizadas mensualmente terminaron en diciembre con números en rojo. Los datos de la entidad indican que la actividad industrial en diciembre cayó -8,3% pero en el global del año está ligeramente positiva (0,3%). No obstante, la industria manufacturera aún se ubica -1,4% por debajo del nivel de 2015, con ocho años de virtual estancamiento.

Las cosas se complicaron con el cambio de Gobierno, la devaluación y también la decisión de cortar la obra pública. “El impacto se ve fuerte por el corte en lo que es inicio de obra, el despacho del cemento a granel cayó 20%, el cemento en bolsa, que marca la actividad privada también se contrajo y el asfalto (obras viales) cayó el 50%, está todo en mínimos históricos”, explicó Natacha Izquierdo, responsable de Prácticas Sectoriales en Abeceb.

Para la especialista todos los sectores vinculados al mercado interno están golpeados, reflejando la retracción de los salarios, que la consultora calcula en 6% en el empleo formal y hasta 16% en los informales. En este contexto, afecta también la inflación, “que podría llegar a un dígito para abril o mayo”, anticipó. Con este panorama “recién en 2025 se podrá empatarle al 2023”, destacó.

Por su parte, Pedro Cascales, industrial pyme y secretario de Carmahe, la cámara de fabricantes de bienes de capital, señala que la actividad está frenada, en muchos casos todavía por problemas con las importaciones o porque no pudieron recomponer la relación con sus proveedores del exterior. Con pocos pedidos nuevos, la actividad se mueve sólo por lo que quedó pendiente de fabricación del 2023.

“Si el cepo seguía más tiempo era game over para la industria nacional”, explica con tono apocalíptico Cascales.

Obviamente, hoy el dólar estable o tendiendo a la baja “facilita mucho, porque genera cierta confianza de que tenés precio”, apuntó el empresario, que valora que la inflación ya empezó un sendero descendente. “El gran interrogante es la gobernabilidad política y la cuestión social”, dijo.

La esperanza está puesta, nuevamente en el segundo semestre del año, pero “con el consumo frenado, hay que encender el otro motor de la economía, que es la inversión”, remató con optimismo Cascales.

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