La inflación interanual de Argentina ya supera el 100% y se espera que lo vuelva a hacer para finales de año. Al mismo tiempo, el 2023 es un año electoral en el que el Gobierno debe tomar, o al menos contemplar, medidas cambiarias y económicas para no perder el rumbo y caer antes de tiempo.
En este contexto, los ahorristas argentinos se preguntan qué hacer con los pesos para poder mantener o incrementar el poder adquisitivo, en especial teniendo en cuenta las tres principales opciones que la mayoría conoce: dólar, plazo fijo y propiedades.
Para el asesor financiero Miguel Braun, la respuesta es sencilla: La opción más segura siempre es el dólar. Esto es porque la emisión monetaria del BCRA está descontrolada, y emiten más de $800.000 millones por mes. A la larga, cuanto más pesos haya en relación a dólares en la economía, más subirá el valor del dólar. El dólar no tiene techo y esta dinámica se explica por el efecto del interés compuesto que generan los pasivos remunerados del BCRA, que son el principal factor de expansión monetaria, explicó el especialista.
Posteriormente, procedió a detallar qué es lo que hay detrás de esta peligrosa operatoria: El BCRA tiene deuda que genera intereses a una tasa efectiva anual superior al 100%. Como el BCRA no genera ninguna ganancia ni utilidad por su actividad, todos esos intereses deben ser pagados con emisión monetaria, lo que genera la inflación y la devaluación que estamos viviendo ahora.
Si esos intereses pagados son usados por los ahorristas para hacer más tasa en pesos, eso genera que crezca la deuda del BCRA y así se va generando una bola masiva de pesos que cada vez paga más intereses y causa más inflación. Si, en cambio, esos intereses son usados para comprar dólares, eso aumenta la demanda por el billete y se empieza a generar la devaluación, añadió.
De acuerdo a Braun, Argentina está metida en este círculo vicioso hace años porque ningún gobierno hace lo que tiene que hacer: bajar el gasto público para dejar de emitir y empezar a pagar la deuda (el capital) y los intereses con ahorro y superávit.
Por este motivo, el experto describió que el plazo fijo devenga una tasa de interés sumamente interesante, pero en muchos casos ni siquiera alcanza para cubrir de la inflación. No es una inversión en activos productivos que generan ganancias, sino que alimentás la bola de pesos del BCRA. Es importante entender que, al hacer un plazo fijo, le prestas plata al BCRA, indicó.
En cuanto a los inmuebles, son una buena alternativa si se pueden colocar en alquiler en dólares. No obstante, tienen muy baja liquidez, ya que los montos de entrada son muy elevados y cuesta encontrarles un comprador y un vendedor.
Es cierto que en este momento están en un valor históricamente bajo, pero es un poco por la incertidumbre y la crisis que se vive en el país. La decisión de invertir en un inmueble deberías hacerla si pensás que el próximo gobierno va a poder sacar al país de la crisis y estabilizar la moneda. Si no, pienso que hay inversiones mejores, sostuvo Braun.
Sin embargo, más allá del dólar, el plazo fijo y las propiedades, el asesor aconsejó prestarles atención a los Cedears (Certificados de Depósito Argentinos), instrumentos financieros que representan porciones de acciones del exterior, pero pueden operarse tanto en pesos como en dólares de forma local y siguen la evolución del dólar CCL.
Pienso que la mejor inversión que podés hacer con los pesos es comprar Cedears, ya que quedás cubierto de la suba del dólar y, además, si elegís bien la empresa, podés disfrutar también de todo el potencial de suba que tenga en el precio de su acción o incluso cobrar unos dividendos, concluyó el ejecutivo financiero.