Markets MoneyShow Colaborador
Una corrección del 10% en el S&P 500; nuevas amenazas de aranceles; una reunión clave de la Reserva Federal... varios sucesos tienen expectantes a los inversores. ¿Hacia dónde irán los mercados? ¿Cuáles son las acciones y fondos con mayor potencial? Los expertos de MoneyShow dan su opinión.
Lawrence McMillan, Estratega de Opciones
El viernes pasado, el S&P 500 activó una señal de compra a corto plazo: la señal de compra del "diferencial del oscilador". Esto pasa cuando los dos osciladores de amplitud, que en las últimas semanas se separaron considerablemente, vuelven a acercarse dentro de un margen de 200 puntos.
Históricamente, esta fue una señal confiable de compra a corto plazo, con una duración de aproximadamente una semana. Para quienes no estén familiarizados con este indicador, se basa en la divergencia y convergencia de dos osciladores clave de amplitud de mercado: el oscilador basado en la Bolsa de Nueva York y el oscilador de "solo acciones". Estas señales ofrecieron oportunidades de trading a corto plazo bastante sólidas en el pasado.
Sin embargo, en el largo plazo, las relaciones put-call exclusivas de acciones crecieron rápidamente, con una fuerte demanda de opciones de venta la semana pasada. Ambas siguen en señal de venta para el mercado accionario, ya que siguen subiendo. La relación ponderada alcanzó los niveles del verano pasado, pero lo más importante no es el nivel absoluto, sino la dirección de la tendencia, que sigue siendo alcista. Estas relaciones put-call no generarán una señal de compra hasta que se reviertan y comiencen a descender.
Por ahora, solo hay una señal de compra confirmada, pero podrían aparecer más en los próximos días. El repunte que seguiría podría llevar al S&P 500 hasta la zona de los 5.900 puntos antes de enfrentar nuevos problemas. Se ajustaron posiciones en opciones de venta profundamente en el dinero y se continuará con esta estrategia según corresponda.
Incertidumbre económica y caída del mercado
Las políticas de represalia arancelaria causaron incertidumbre económica y un retroceso del mercado que algunos comparan con lo ocurrido en 2020 durante la pandemia. La comparación es razonable, pero la situación actual no es la misma que hace cuatro años. Muchas de las preocupaciones del mercado podrían disiparse.
Esto puede suceder tan rápido como surgieron los problemas, con mayor claridad y a un ritmo más pausado. Cuándo podría terminar la corrección y cuál sería el nivel clave para el S&P 500 son dos preguntas clave mientras el índice sigue profundizando su retroceso.
Para entender mejor el "cuándo", se recopilaron datos sobre el rendimiento del mercado después de inauguraciones presidenciales. Además de confirmar que la caída actual fue fuerte, los datos muestran que no fue la peor post-inaugural. En los últimos tiempos, los años 2009 y 2001 resultaron peores.
Al graficar los 30 días previos y los 100 posteriores a las inauguraciones, se evidenció que, en promedio, hay 21 jornadas bursátiles por mes. Además de la línea general, se desglosó el rendimiento según si el presidente electo era republicano o demócrata. La línea correspondiente a Trump 2.0 refleja el rendimiento actual del S&P 500 al cierre del 13 de marzo. El flojo desempeño del mercado bajo presidencias republicanas es coherente con lo que se documenta en el calendario 2025.
Trump 2.0 parece seguir la línea republicana histórica bastante de cerca, aunque la magnitud de la caída del S&P 500 este año es mayor. Si el índice mantiene este patrón, podría tocar un piso en la segunda mitad de marzo y volver a testearlo a principios de abril. Luego, podría empezar a recuperarse, tal como pasó en administraciones republicanas previas.
Jay Pelosky - TPW Advisory
El entusiasmo y la euforia que generó la victoria de Trump, especialmente entre los inversores minoristas, se transformó en un sentimiento de mercado similar al del fondo bajista de 2022. Además, la rotación de activos es clave en los mercados alcistas, y actualmente es global: de Estados Unidos hacia otros mercados. ETFs como el iShares MSCI Emerging Markets ETF (EEM) están capturando ese movimiento.
El cripto, considerado "la operación Trump", se desplomó al igual que muchas acciones de crecimiento y sectores especulativos. ¿Se acuerdan de la moneda de Trump? ¿La de Melania? Perdieron el 90% de su valor.
La debilidad del mercado accionario se concentró en el grupo Mag 7, que sufrió un golpe con la aparición de Deep Seek. El traspaso de capital del Mag 7 hacia fondos de tecnología china como el KraneShares CSI China Internet ETF (KWEB) fue una de las rotaciones más rápidas y claras que se vieron.
Por otro lado, en las últimas dos semanas, los mercados bursátiles fuera de Estados Unidos demostraron un desempeño relativo fuerte. ETFs como el iShares MSCI EAFE ETF (EFA) y el EEM se mantuvieron por encima de sus medias móviles de 200 días, mientras que el S&P y el Nasdaq quebraron esos niveles. Esto confirma que la rotación hacia acciones globales está en marcha.
Se mantiene una posición firme a favor de la renta variable fuera de EE.UU., con sobrepeso en Europa y Asia. Se priorizan grandes capitalizaciones, bancos (por el crecimiento del crédito, menor morosidad y mayor actividad de fusiones y adquisiciones) y el sector de defensa en Europa. En Asia, sigue un fuerte interés en Japón.
También se mantienen posiciones sobreponderadas en mercados emergentes, con especial atención en China, tanto en acciones de gran capitalización como tecnológicas. Estas posiciones fueron parte del modelo Global Multi Asset (GMA) desde hace tiempo, con la excepción de defensa en la Unión Europea, que se agregó el mes pasado. Se aprovecharían subas en acciones de EE.UU. para reducir posiciones y caídas en otros mercados para sumar exposición.
Nota publicada en Forbes US.