El Gobierno implementó cambios en el régimen de impuestos internos aplicados a los autos considerados "de lujo". Estos estarán en vigor hasta el final del año y se actualizarán de forma trimestral, lo que se espera que revitalice el mercado automotor, que había experimentado una parálisis desde principios de enero debido a la falta de actualización de este impuesto.
A través del Decreto 84/2024, publicado en el Boletín Oficial, el Poder Ejecutivo estableció que estas modificaciones serán aplicables a partir de este jueves hasta el 31 de diciembre de 2024. Según el texto oficial, se suspende temporalmente el impuesto previsto en el artículo 39 de la Ley de Impuestos Internos para aquellas operaciones cuyo precio de venta, excluyendo impuestos y opciones, sea igual o inferior a $19.826.151 millones.
En el caso de operaciones cuyo precio de venta esté por encima de esa cifra, y sea inferior a $36.602.126 millones, se aplicará una tasa del 20%, mientras que para aquellas que superen este último monto, la tasa será del 35%.
Para los bienes contemplados en el artículo 38 de la mencionada ley, se suspende temporalmente el impuesto del artículo 39 para operaciones cuyo precio de venta, excluyendo impuestos y opciones, sea igual o inferior a $5.324.463 millones.
Cuando el precio supere esta cifra pero sea inferior a $6.826.234 millones, se aplicará una tasa del 20%. Si el precio alcanza o supera este último monto, la tasa será del 30%.
La AFIP será responsable de actualizar trimestralmente, a partir de abril de 2024, los importes de este impuesto, teniendo en cuenta la variación del Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM) calculado por el INDEC hasta el trimestre calendario anterior a la actualización.
El Gobierno justifica esta medida debido a las significativas transformaciones en las principales variables macroeconómicas y en los precios relativos. Esto torna necesario realizar, transitoriamente, ciertas adecuaciones a los valores establecidos en el artículo 39 de la ley (de impuestos internos), detallan.
"Así se permite atender la situación económica de los sectores de que se trata e intenta adecuar las condiciones de mercado al nuevo esquema de costos de producción involucrados y los precios relativos de la economía, evitando posibles consecuencias en términos de caída de la producción y del empleo", añadió.