En los últimos años, los inversores globales se desprendieron de miles de millones de dólares en acciones chinas. De hecho, el índice CSI 300 que nuclea las principales compañías del país todavía está un 39% por debajo del máximo alcanzado a principios de 2021.
Para revertir esta situación, el propio Gobierno chino comenzó a instar a las empresas cotizantes a repartir más y mejores dividendos, con la idea de que esta política podría captar nuevamente la atención del mercado.
“Las empresas chinas que cotizan en bolsa tradicionalmente no pagaron suficientes dividendos. Ahora las estamos animando a que paguen más dividendos”, comentó Fang Xinghai, vicepresidente de la Comisión Reguladora de Valores de China. "Esto debería mejorar mucho el valor de las acciones chinas para los inversionistas en el futuro", sostuvo el funcionario durante un evento organizado por las bolsas de valores de Shanghai y Shenzhen.
"Estamos animando a las empresas a pagar más dividendos, a valorar las relaciones con los inversores, y ese es el nuevo estilo en el que muchas empresas están poniendo mucho énfasis", dijo Huiqi Pei, del departamento internacional de la Bolsa de Valores de Shenzhen.
De acuerdo a Xinghai, los factores que impulsaron las rápidas tasas de crecimiento de China durante varias décadas, como la inversión en infraestructura, bienes raíces y exportaciones, ahora están “claramente retrocediendo”. "Entiendo que esto está muy presente en la mente de los inversores cuando consideran invertir en activos chinos, particularmente en acciones", indicó.
Por estar razón, el Gobierno chino ahora se está enfocando en tres nuevos disparadores: las exportaciones a los países en desarrollo, el aumento del consumo interno desde niveles relativamente bajos frente a Estados Unidos y otras economías avanzadas y la creación de excelencia manufacturera.
Además, los aumentos de la productividad derivados de la automatización y la digitalización en la fabricación, en donde la inteligencia artificial cumple un rol fundamental, también deberían garantizar una recuperación de las ganancias corporativas, según Xinghai.