En una de las semanas más movidas de los últimos años en el mundo del litio argentino, el sector se congregó en un seminario internacional celebrado en Jujuy, donde analizaron la marcha de los proyectos en construcción, los desafíos por las fluctuaciones de precio y demanda global, las medidas del Gobierno y, por sobre todo, el impacto del ingreso de un gigante como Río Tinto.

La venta de Arcadium a uno de los dos jugadores más grandes de toda la minería mundial acaparó todas las charlas del evento organizado por Panorama Minero y fue recibida con mucho entusiasmo por todos los actores por lo que representa para la Argentina y para el litio en general. 

"Río Tinto es fuerte en un montón de minerales, pero no en litio. No es una cosa menor que el litio empiece a ser importante dentro de su cartera. Como industria me parece muy positivo. Y como Argentina en sí, obviamente ayuda a esta promoción de explicar al mundo que ahora tenemos una mirada distinta del desarrollo minero. Los ingresos de BHP y Río Tinto al país son noticias que impactan a nivel global y promocionan a la Argentina en todos lados", afirmó Ignacio Celorrio, de Lithium Argentina.

En ese sentido, la ex secretaria de Minería y actual secretaria ejecutiva de la Mesa del Litio, Flavia Royón, contó que la semana pasada se reunió con el CEO de Río Tinto y que se sorprendió por el optimismo que tenía por la Argentina.

"Menciono dos países como los que más le interesaban en el mundo y uno era Argentina. Está muy entusiasmado por lo que está pasando en el país. Quiere hacer una apuesta muy grande y no sólo en el litio, en el cobre también", reveló. 

En los pasillos del seminario, muchas firmas de origen estadounidense y europeo también celebraban la noticia dado que rompe con la concentración de firmas chinas, algo que preocupa en términos geopolíticos.

"Nos encontramos en una encrucijada para encontrar socios confiables y solo los vamos a encontrar de este lado del Atlántico", subrayó el embajador de la Unión Europea en la Argentina, Amador Sánchez Rico.

Inversiones

Justamente, una de las empresas que más enfatizó su decisión por invertir en el litio argentino fue la china Ganfeng, que está desarrollando cuatro proyectos donde desembolsará algo más de 3.000 millones de dólares en total.

"Somos muy optimistas en Argentina. Ahora tenemos cuatro proyectos en Argentina. Uno en Jujuy donde ya llegamos a alrededor del 70 al 75% de la capacidad de producción nominal y el segundo proyecto como Mariana, comenzaremos la puesta en servicio en el cuarto trimestre de este año. Tenemos un tercer proyecto, PPG, donde planeamos ver si el próximo año podemos comenzar la construcción de ese proyecto", afirmó el CEO, Jason Luo.

Otra de las grandes apuestas de este año la hizo la francesa Eramet, que puso en marcha el cuarto proyecto de litio en la Argentina. "Este año podríamos denominarlo el año francés. Tenemos el placer de anunciar que las empresas francesas han marcado hitos en la transformación de litio. El caso principal es el de Eramet, donde el estado francés es accionista y con su planta de 25 mil toneladas invirtió más de 800 millones de dólares con una tecnología de extracción directa", precisó el embajador Romain Nadal. 

En tanto, además del acuerdo por 6.700 millones de dólares por la compra de Arcadium que incluye todas sus operaciones en la Argentina, Río Tinto anunció que analiza invertir otros 2.000 millones en el proyecto Rincón, en Salta.

Las cuestiones que siguen preocupando

Más allá del clima de optimismo, hay muchos aspectos que siguen siendo preocupantes para la mayoría de las empresas tanto en términos globales como nacionales. En el primer rubro se ubica la discusión sobre el futuro de los precios y la demanda mundial, que están en un nivel mucho más bajo del esperado.

"Me preocupa que el precio esté tan bajo. Muchas empresas tuvieron que cerrar en Australia porque los costos no les dan. Según mi punto de vista, vamos a tener una década más de volatilidades importantes en los precios", opinó el CEO de Eramine, Alejandro Moro.

"Cuando uno ve los vaivenes de los precios es porque ese mercado no está asentado, es un mercado en formación. El aumento de autos eléctricos en el sudeste asiático tuvo un incremento exponencial, pero el crecimiento se va achicando", coincidió Ignacio Celorrio.

Respecto a las problemáticas locales, el consenso de los entrevistados mencionó la falta de infraestructura y el desorden macroeconómico. "El RIGI es condición necesaria, pero no suficiente. A la Argentina le falta más orden macroeconómico y mucha infraestructura que tiene un costo elevadísimo en la puna", dijo Moro. 

En cambio, en diálogo con Forbes, el gobernador de Jujuy, Carlos Sadir, opinó que la salida del cepo no es tan importante, ya que el RIGI soluciona esos problemas. "Brinda herramientas a los inversores para que se instalen. Soluciona muchas de las cuestiones que siempre fueron obstáculos para la instalación de capitales tan importantes como demanda la minería. Como el acceso al mercado cambiario o acceso a la exportación", señaló.