El Banco Central volverá ser el principal auxilio del Tesoro Nacional en 2022, ya que financiará el 79% del déficit financiero de todo el año, de acuerdo con el análisis del proyecto de ley de Presupuesto que realizó el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF).
La estimación de la entidad, en un informe realizado por Nadín Argañaraz y Ariel Barraud, deja en evidencia que se volverá a recurrir a la emisión monetaria para hacer frente al déficit fiscal, con una inflación proyectada del 33%, inferior a la esperada para 2021 pero cuatro puntos porcentuales más que la pautada en los supuestos macroeconómicos con los que se elaboró el Presupuesto.
Respecto a lo que resta del año en curso, el promedio de inflación para el último cuatrimestre no podrá exceder el 2,34% mensual para que se alcance la nueva pauta del 45,1%, si se tiene en cuenta el escaso margen que deja el 32,3% acumulado hasta agosto.
El proyecto de presupuesto enviado propone un cuadro fiscal 2022 que da como resultado primario un déficit de $2.014.116 millones equivalente al 3,3% del PIB. Al sumarse los intereses, el déficit entre ingresos y gastos totales del SPN ascendería a $2.961.849 millones, señaló IARAF en su análisis del proyecto.
La entidad remarcó que al considerar cómo cubrir este rojo fiscal, el presupuesto planea financiar un 79% del mismo a través del BCRA (básicamente Adelantos Transitorios, puesto que no se presupuestaron transferencias de utilidades para el año que viene).
Por otra parte, IARAF relativizó las proyecciones de variación del gasto para el último tramo de 2021 e indicó que debiera apreciarse una importante aceleración en los últimos cinco meses en comparación con las erogaciones ejecutadas hasta julio. Por ejemplo, el gasto en personal en los últimos 5 meses del año debiera mostrar un crecimiento del 29% real y el gasto en bienes y servicios casi duplicarse en términos reales, indicó al respecto.
En ese marco destacó al gasto de capital como el caso más notable, que entre enero y julio tuvo un crecimiento real del 55% en comparación con el mismo período de 2020, pero en los últimos 5 meses del 2021 tendría que crecer al 224% real para cumplir la pauta presupuestaria.
Por otra parte, IARAF destacó que en la evolución de la recaudación tributaria el año próximo tendrá una composición diferente a la de 2021, ya que los recursos provenientes del Comercio Exterior (principalmente retenciones) tendrán una caída en términos reales, a diferencia de lo ocurrido en el presente año.
La recaudación de impuestos nacionales medida como porcentaje del producto mostrará en 2022 un aumento de 1 punto porcentual, pasando del 24,9% del PIB en 2021 al 25,9% en el próximo año.
En ese aspecto, se prevé un incremento de 0,6 puntos en los aportes y contribuciones de la Seguridad Social, en base a la recuperación en el mercado laboral. Ese incremento sería similar al que, sumados, representarían las subas en Ganancias (+0,37 p.p.), IVA (+0,15 p.p.) y Bienes Personales (+0,07 p.p.).
Respecto de estos tres gravámenes, IARAF indicó que conforman la masa coparticipable con provincias, de modo que estas mejoras se comparten con dicho nivel de gobierno. Esos incrementos más que compensan las caídas que se esperan en la recaudación de los tributos vinculados al Comercio Exterior, como los aranceles (-0,03 p.p.) y los derechos de exportación (-0,28 p.p.).
*Con información de NA