Para mantener el poder adquisitivo y tratar de ganarle a la inflación que parece no tener límites, muchos ahorristas deciden dar el paso y se adentran en el mundo de las inversiones. No obstante, no saben cómo arrancar. Para todos ellos, a continuación, los puntos más importantes a tener en cuenta.
El intermediario financiero
Lo primero que hay que hacer es decidir si vamos a invertir a través de un banco o de un bróker. La decisión no solo tendrá que basarse en la confianza, sino también en los costos y la versatilidad.
Al no ser el negocio principal de los bancos, sus plataformas para invertir y el vínculo con el asesor financiero designado brindado no suelen estar tan optimizados como sucede con las sociedades de bolsa. Además, los costos, normalmente, son mayores.
Actualmente, existen cientos de brókers, pero la gran mayoría permite abrir una cuenta en pocos pasos y completamente a distancia. Bolsas y Mercados Argentinos (BYMA) elabora todos los meses un ranking compuesto por los intermediarios financieros que más operan. El listado es un buen punto de partida para conocer las diferentes compañías que permiten invertir en la bolsa.
El perfil de inversor
Posteriormente, hay que tomarse unos minutos para conocernos como inversores. ¿Cuánto capital voy a invertir? ¿Cuál es mi horizonte temporal? ¿Qué rentabilidad busco? ¿Para qué estoy invirtiendo? ¿Qué voy a hacer cuando el mercado caiga? Estas y muchas otras preguntas más serán realizadas en los famosos tests del inversor.
José Luis Pavesa, asesor patrimonial en Bull Market Brokers, explicó que el test del inversor sirve para que cada uno conozca su propio perfil de inversor de acuerdo, sobre todo, a qué aversión al riesgo tiene.
En el mercado hay muchísimas alternativas para todo tipo de inversores: para arriesgados, para muy conservadores, etc. Pero para eso uno tiene que determinar su propio perfil, agregó, y ejemplificó con el contexto actual: "Hay gente que ahora se asusta y enseguida vende y sale y después quizás compra cuando el mercado ya subió mucho. Eso tiene que ver con los perfiles de cada uno.
En esta misma instancia, al determinar las rentabilidades y objetivos, hay que tener en cuenta que, a mayor rendimiento buscado, mayor riesgo. Cuando hablamos de riesgo estamos hablando de volatilidad, de incertidumbre. De que la inversión no sea la esperada o que se pueda perder dinero, detalló Pavesa.
El asesoramiento
Por otro lado, el especialista recomienda hablar con un asesor para obtener los conocimientos necesarios y saber los riesgos de los distintos activos en los que se pretende invertir.
Muchas veces, los inversores novatos comienzan a comprar acciones y bonos sin siquiera saber cómo funcionan, lo que suele resultar en graves pérdidas y en el posterior miedo a volver a invertir en la bolsa.
Para evitar esta situación, lo ideal es charlar con expertos de la materia, los cuales suelen estar disponibles de forma gratuita al abrir una cuenta comitente (cuenta de inversiones) en un bróker.