El empresario Alejandro Bulgheroni, presidente de Pan American Energy (PAEG), respaldó el rumbo de las políticas del gobierno nacional que encabeza Javier Milei y dijo que la Argentina “va en la dirección correcta para generar inversiones y mejoras en la macroeconomía”, pero advirtió que si el Congreso no acompaña leyes clave “el cambio va a ser más lento”. 

Al participar del Foro “La cooperación para un mundo sostenible” que organiza la International Economic Forum of the Americas (IEFA), el empresario sostuvo que “las nuevas autoridades del Gobierno están implementando de forma decisiva un plan de estabilización para restaurar las variables económicas”.

“En la Argentina los recursos están disponibles, pero el tema siempre es la macroeconomía. Se están llevando adelante muy rápido los cambios macro. Milei está haciendo lo mejor que se puede hacer. Cuando lo conocí y supe lo que pensaba como economista, vi que la oportunidad de que la Argentina salga adelante estaba, ya que propone cambios que van en la dirección correcta, aunque por ahora no tienen el apoyo del Congreso. Pero si no se votan las leyes, el cambio va a tardar más”, señaló.

Y agregó que "están las cosas dadas, la mente clara en el Presidente y es un factor muy importante porque a la larga los otros miembros del gobierno se van a dar cuenta de que ese es el camino".

Con respecto al sector energético, el presidente de PAEG explicó que “hay que tener ganas de hacer las cosas, de llevar adelante los proyectos que tiene. Las inversiones en energía llevan 4 a 5 años. El gas natural y el petróleo que tenemos son importantes. El potencial es enorme, nosotros en PAEG invertimos 1,000 millones de dólares al año en la situación anterior de la macro argentina, llena de incertidumbre. Y si se generan reglas claras y se convence a los inversores de que van a permanecer, van a llegar”. 

Bulgheroni dejó en claro las diferencias entre los tiempos de las empresas y de la política. “El sistema de elecciones cada 2 años es muy inestable para algunas inversiones. Los últimos 60 años han sido todas políticas de parche. Solo con Frondizi y Menem hubo políticas razonables. Pero ahora creo que se está yendo al fondo de la cosa y se está haciendo muy bien. Acá hubo siempre piedras en el camino para que las cosas no se hicieran. Ahora eso está cambiando. Hacen falta decenas de miles de dólares en inversión y estamos esperando que nos bajen la bandera para invertir más, porque la oportunidad más grande y más urgente de Argentina es el desarrollo de reservas de gas e hidrocarburos, ya que hoy hay más consumo que hace 2 o 3 años”.  

El empresario resaltó el momento de Argentina y sus oportunidades. “Están todas las cosas dadas para cambiar, porque pese a que todos los consumos han bajado y hay recesión, pero esto va a cambiar en tanto y en cuanto se desarrollen los proyectos que hay. Existen quienes desarrollan litio al igual que cobre, en Argentina hay oportunidades. La minería es importante y Argentina tiene muchas oportunidades. Para mí la recuperación va a depender mucho de las regulaciones que se cambien, que hagan venir la inversión. Esto ya lo vimos en los 90, en poco tiempo se cambiaron las condiciones y se empezó a invertir. Los primeros que invertimos somos los petroleros y la minería, son inversiones a largo plazo”.

En el marco de la propuesta del foro sobre “Creación de valor a través de inversiones energéticas”, el titular de PAEG explicó que “Argentina tiene exceso de recursos para el mercado interno”.

Con respecto a la transición energética global agregó que “Tenemos que producir energía limpia y accesible para todos. Hoy la única fuente que cumple esto es el gas. Hay que sustituir el carbón, que hoy es el 30% de la energía del mundo y que es muy contaminante. Pero hay grandes diferencias entre los países que pueden subvencionar energías limpias y más del 50% que no pueden hacerlo y usan carbón. Argentina tiene energía muy poco contaminante y nada de carbón, tiene una matriz energética bastante limpia, y la va a seguir limpiando. Pero a veces los gobernantes dicen una cosa y la economía dice otra. Por eso el consenso para mejorar la matriz energética mundial no va a resolverse en 30 o 40 años, va a ser más largo. India y China siguen haciendo centrales a carbón y lo seguirán haciendo hasta 2030 al menos. Europa pensó que Rusia era un proveedor confiable y se equivocó en gran forma, ya que el gobierno ruso usa el gas como un proyectil”.