Los precios al consumidor de EE.UU. apenas subieron en mayo y el aumento anual de la inflación fue el menor en más de dos años. Según los datos oficiales, el aumento fue de 0,1% en mayo, lo que deja en un 4% interanual y debería tener una repercusión directa en la suba de tasas que la FED anunciará este miércoles 14 de junio. De todas formas, para el organismo la inflación anual debería rondar el 2% por lo que sostendría tasas altas hasta cumplir con esa meta. 

El aumento menor al esperado en el Índice de Precios al Consumidor, informado por el Departamento de Trabajo de Estados Unidos este martes, reflejó disminuciones en los costos de los productos y servicios energéticos, incluida la gasolina y la electricidad. Pero los alquileres se mantuvieron rígidos y los precios de los automóviles y camiones usados aumentaron aún más. El informe se publicó cuando los funcionarios de la FED comenzaron una reunión de política de dos días.

"La desaceleración moderada le da a la Fed espacio para pausar sus alzas de tasas esta semana", dijo Kathy Bostjancic, economista jefe de Nationwide en Nueva York. "Sin embargo, si los datos económicos siguen sorprendiendo al alza y la inflación sigue estancada, la puerta está abierta para otra subida de tipos en los próximos meses, tan pronto como en julio", agregó al respecto. 

Luego de anunciarse el dato de inflación, el presidente Joe Biden saludó la moderación de los precios. "Si bien hay más trabajo por hacer, nunca he sido más optimista de que nuestros mejores días están por venir", dijo Biden en un comunicado.

Por otro lado, las acciones en Wall Street subieron, con los índices S&P 500 y Nasdaq alcanzando nuevos máximos de un año, el dólar cayó frente a una canasta de monedas y los precios del Tesoro de EE.UU. subieron después de los datos.

Cómo repercute la baja de inflación en las tasas de interés

Los economistas creen que la inflación gradual y la desaceleración del mercado laboral le dan a la FED espacio para evitar un aumento de las tasas de interés por primera vez desde marzo de 2022, cuando el banco central de EE.UU. se embarcó en su campaña de ajuste de la política monetaria más rápida en más de 40 años.

Se espera que la FED, que ha subido su tipo de referencia en 500 puntos básicos en este ciclo de ajuste, deje la puerta abierta a nuevas subidas de tipos aunque los economistas argumentan debería pausar más aumentos de tasas mientras evalúa el impacto de los pasos que ha tomado hasta ahora para enfriar la demanda.

"Esperamos una desaceleración más notable en los precios subyacentes en los próximos meses", dijo Michael Pugliese, economista senior de Wells Fargo en Nueva York. "Dicho esto, el progreso direccional no debe confundirse con la misión cumplida. Hay mucho terreno por recorrer en la lucha contra la inflación, lo que debería evitar que la Fed recorte las tasas hasta 2024".

*Información de Lucía Mutikani; Editado por Chizu Nomiyama, Paul Simao y Andrea Ricci de Reuters.