Alemania, India o Turquía: quién va a comprar el GNL de Vaca Muerta
Forbes habló con el ministro de Energía de Turquía que se suma a la lista de offtakers. Cómo están las negociaciones con cada país, mientras se confirma la llegada de un segundo barco para exportar gas licuado.

El proyecto Argentina GNL sumó nuevos interesados en esta CERAWeek. El ministro de Energía de Turquía, Alparslan Bayraktar, confirmó a este medio el interés por el gas de Vaca Muerta, aunque se mostró algo escéptico respecto a la fecha en la que podrían iniciar las exportaciones. 

"Cuando tengan listos sus proyectos de GNL ahí hablaremos", respondió ante la consulta de Forbes después de un panel en el que planteó la necesidad de incrementar sus compras de este insumo.

"El GNL es una fuente muy importante de abastecernos de gas. Estamos invirtiendo en varias terminales de regasificación nuevas para llegar a cubrir el 50% de nuestras necesidades con GNL y también para exportar hacia Europa y países vecinos mediante nuestra red de gasoductos", afirmó en su exposición. 

Las negociaciones entre ambos países están siendo conducidas por las dos empresas de mayoría estatal: YPF y Botaş, quienes ya tuvieron un primer encuentro en Ankara durante la gira de Horacio Marín.

Fuentes de la firma turca presentes en Houston indicaron a Forbes que las charlas están avanzando entre los equipos técnicos, aunque faltan muchas cuestiones por resolver. Para tener referencia Turquía necesita unos 150 barcos de GNL al año y está buscando diversificar su fuente de proveedores para no tener que depender de ningún comprador.

En tanto, desde Argentina explicaron a este medio que si bien hay otros países que corren con ventaja, no se descarta la alternativa turca según la demanda que se acuerde. La producción de los primeros dos barcos, con una capacidad total de 6 MPTA, se destinaría a Alemania, aunque existe la posibilidad de incrementar el tamaño del segundo barco y enviar a Turquía el volumen adicional.

El primer buque licuefactor flotante llegaría en 2027 y el segundo, que como dijo Daniel González está muy cerca de cerrarse, podría arribar entre fines del 2027 y principios del 2028. La siguiente etapa, que apunta a 2029 o 2030, sería de otros dos barcos con una capacidad mucho mayor: 10 MPTA cada uno.

La idea es que la producción de uno de ellos se entregue en su totalidad a Shell que tendría el doble rol de socio en la producción y offtaker (comprador). En tanto, las otras 10 millones de toneladas de GNL se exportarían a India, otro país con el que ya se han firmado cartas de intención.

Si bien no hay nada acordado, se firmaron 23 cartas de intención con diferentes offtakers y la idea del consorcio de empresas que componen el proyecto Argentina GNL es rubricar los contratos durante este año junto con la decisión final de inversión.

El primer barco será liderado por PAE con un 40% de participación, seguida por Pampa (20%), YPF (15%), Harbour Energy (15%) y Golar (10%), números que seguramente serán distintos en las siguientes embarcaciones.

Ya para una etapa posterior, no se descarta construir una planta en tierra con mucha más capacidad, pero también mucho más desafiante en términos de financiamiento y plazos. Aunque, con esta nueva era que instaló Donald Trump en la que los tiempos de la transición energética se alargan, Argentina tendría una ventana de oportunidad mucho mayor para poner en valor sus recursos hidrocarburíferos.