En lo que va del año, las acciones de Nvidia acumulan una suba del 222%; desde el mínimo relativo de octubre de 2022, la cotización ya crece un 343%. Gracias a este sólido comportamiento alcista, el fabricante de tecnología actualmente tiene un tamaño de US$ 1,21 billones y es la sexta empresa más grande del mundo.
Sin embargo, el incremento de precio de las acciones parece no estar impactando en su valor, ya que algunos especialistas de Wall Street creen que todavía están “realmente muy baratas”.
De acuerdo a Alec Young, estratega jefe de inversiones en Mapsignals, las estimaciones de ganancias de Nvidia siguen aumentando, y el precio de sus acciones en relación a los beneficios estimados cayó al nivel más bajo desde mediados de 2022.
Posteriormente, detalló que la relación precio-beneficio (PE, por su sigla en inglés) de la compañía, que actualmente ronda las 115 veces, es inferior a la tasa de crecimiento proyectada.
Por su parte, Michael Sansoterra, director de inversiones de Silvant Capital Management, agregó que Nvidia “está creciendo decididamente más rápido que la gran mayoría de otras empresas”, por lo que su valuación “es relativamente económica”.
La valoración de Nvidia se fundamenta en ganancias que aún no se concretaron en una industria reconocidamente cíclica, incluso por aquellos optimistas.
En contraste, el fabricante de chips tiene un valor aproximado de 35 veces sus ventas, siendo de lejos la acción más costosa dentro del S&P 500. Cadence Design, que ocupa la segunda posición, vale la mitad, y el promedio de referencia es 2,4 veces más bajo.