El presidente electo, Donald Trump, invitó al presidente chino Xi Jinping a asistir a su asunción el mes próximo. Así lo confirmó el jueves el futuro secretario de prensa de Trump. Es una invitación poco probable, no solo por la postura combativa del nuevo mandatario hacia China, sino también porque los líderes extranjeros nunca antes asistieron a una asunción presidencial en Estados Unidos.
La vocera de Trump, Karoline Leavitt, confirmó el jueves en el programa "Fox and Friends" la invitación del presidente electo, luego de que CBS News reportara la noticia el miércoles por la noche. Leavitt afirmó que esto era "un ejemplo del presidente Trump generando un diálogo abierto con líderes de países que no solo son aliados, sino también adversarios y competidores".
Vale recordar que Trump criticó duramente a China tras su elección, y en noviembre anunció que impondrá aranceles adicionales a las importaciones provenientes de ese país. Sin embargo, mantuvo que tiene una relación positiva con Xi, y declaró el domingo en "Meet the Press" que habló con el líder chino en la última semana.
Aún no está claro si Xi Jinping asistirá al evento del 20 de enero. Leavitt dijo en Fox que eso "está por determinarse". Si Xi u otro líder mundial participa en la ceremonia, sería un hecho histórico.
Registros del Departamento de Estado que datan de 1874, cuando ocurrió la primera visita de un líder extranjero a Estados Unidos, muestran que ningún jefe de estado asistió a una asunción presidencial en el país. Sin embargo, CBS señala que es común que diplomáticos extranjeros de menor rango o embajadores estén presentes.
Los líderes extranjeros no suelen ser invitados a las ceremonias de asunción debido a las grandes multitudes y las "preocupaciones de seguridad". Así lo informaron funcionarios a la agencia Associated Press en 2009, cuando el equipo de transición de Barack Obama decidió no invitar a ningún jefe de estado, y mencionaron precedentes históricos.
Además, sería inusual para Xi, quien, según destaca el South China Morning Post, no asistió a eventos similares en otros países.
Frase clave
Trump reconoció el jueves, al inaugurar la Bolsa de Valores de Nueva York, que estuvo "pensando en invitar a ciertas personas a la asunción", según reportó la AP, aunque no mencionó nombres específicos. "Y algunas personas dijeron: 'Wow, eso es un poco arriesgado, ¿no?'", agregó el presidente electo. "Y yo dije: 'Tal vez lo sea. Veremos. Veremos qué pasa. Pero nos gusta tomar pequeños riesgos'".
¿Podrían asistir otros líderes extranjeros a la asunción de Trump?
Leavitt afirmó el jueves que otros líderes mundiales también fueron invitados a la asunción, aunque evitó mencionar nombres. Si bien no está claro quiénes podrían asistir, se informó que Trump extendió una invitación al primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, un aliado de larga data de Trump. Según fuentes citadas por CBS News, Orbán "aún está considerando" si asistirá.
Un líder que, sin embargo, no se espera que haga acto de presencia es Vladimir Putin de Rusia. El Kremlin confirmó el jueves que no recibió una invitación para la ceremonia de juramento, según informó Sky News.
Contexto clave
Trump mantuvo una relación conflictiva con China durante su primer mandato como presidente. Impuso aranceles a las importaciones del país que desataron una guerra comercial y calificó al COVID-19 como un "virus chino" en los primeros días de la pandemia, pese a las advertencias de que eso podría aumentar la violencia contra asiático-americanos.
No se espera que Trump suavice su postura hacia China en su segundo mandato, ya que prometió imponer aranceles del 60% a las importaciones provenientes del país y nominó al senador Marco Rubio, conocido por su línea dura contra China, como secretario de Estado.
Trump y Xi se reunieron en múltiples ocasiones durante el primer mandato de Trump. El presidente electo elogió al líder chino incluso mientras criticaba al país, declarando en febrero a Fox que Xi le cae "muy bien" y que fue "un muy buen amigo mío durante mi mandato". También afirmó en el podcast de Joe Rogan que Xi es un "tipo brillante" que "controla a 1.400 millones de personas con mano de hierro".
Por su parte, Xi prometió trabajar con Trump durante una reunión con el presidente Joe Biden en noviembre. Señaló que es "crucial para ambas partes y para el mundo" que Estados Unidos y China mantengan una relación estable.
Nota publicada por Forbes US