Jensen Huang, el fundador y actual director ejecutivo de Nvidia, está por entrar al top 10 de las personas más ricas del mundo.
A día de hoy, con una fortuna de US$ 119.000 millones, el empresario se encuentra en el puesto 12, por encima de Mukesh Ambani (US$ 113.000 millones) y por debajo de Michael Dell (US$ 122.000 millones).
En lo que va del año, Huang ganó casi US$ 75.000 millones. Y en la última jornada, cerca de US$ 4.000 millones. Evidentemente, la razón detrás del incremento de valor es la suba de las acciones de Nvidia.
El fabricante de chips para centros de datos se disparó un 175% en lo que va del año. De esta manera, se convirtió en la compañía más grande del mundo al alcanzar una capitalización bursátil de US$ 3,33 billones.
En los últimos tiempos, la empresa ganó un gran protagonismo por vender productos vinculados a la inteligencia artificial (IA), una tecnología que llegó para quedarse y cada vez se utiliza más.
De hecho, a principios de mes, Nvidia presentó una plataforma de IA llamada Rubin que se lanzará en 2026 y utilizará HBM4, la próxima versión de la memoria de alto ancho de banda.
Durante un discurso de apertura en la feria Computex llevada a cabo en Taiwán, Huang dijo que está habiendo “inflación computacional”. Básicamente, el ejecutivo remarcó que, a medida que la cantidad de datos que se deben procesar crece de forma exponencial, los métodos informáticos convencionales no pueden seguir el ritmo y sólo la computación acelerada de Nvidia puede reducir los costos.
Por esta razón, se estima que Nvidia seguirá dominando el sector, incluso a pesar del crecimiento de la competencia como AMD, Qualcomm o Intel.