El proyecto de Elon Musk de crear una flota para conquistar el espacio se encuentra en una etapa clave. El empresario ya realizó algunos avances pero necesita continuar mejorando sus cohetes para conseguir todos sus objetivos. Por ese motivo, realizó un pedido especial a todo su equipo en el cual también mostró su miedo a una posible quiebra.
El tema que desvela a Musk son los motores Raptor, que impulsan a los cohetes Starship construidos por SpaceX. Los vehículos son tan grandes y pesados que en total se necesitan 39 motores por cada uno de ellos. Y como Musk planea llevar y traer personas a la Luna, Marte y otros destinos extraplanetarios, necesita producir miles de Raptor.
Sin embargo, según se filtró en una carta que el propio Musk habría escrito, la empresa se encuentra lejos de ese objetivo y, de no lograrlo, se enfrentarán a consecuencias nefastas para su patrimonio.
Esta situación es una crisis y es mucho peor de lo que parecía hace unas semanas, comienza el mail dado a conocer por Space Explored. Y continúa: Personalmente renuncié a unas vacaciones de fin de semana de Acción de Gracias planificadas para trabajar en la línea de producción de Raptor e imploro a todos los empleados de SpaceX que contribuyan sí pueden hacerlo.
Por otro lado, en el escrito Musk es bastante insistente con la necesidad de que todos los empleados se presenten a trabajar. "A menos que tenga asuntos familiares críticos o no pueda regresar físicamente a Hawthorne (sede de SpaceX en la zona metropolitana de Los Ángeles), necesitaremos todas las manos a la obra para recuperarnos de lo que es, francamente, un desastre", señala el empresario.
En esa misma línea, el CEO de Tesla señala que las Starship deben estar listas para lanzar la versión 2 de los satélites de Internet Starlink de SpaceX. La compañía ya envió más de 1.600 naves V1 Starlink, y aproximadamente 100 de la línea V1.5 más avanzada, con su cohete Falcon 9. Pero ese lanzador no soporta los satélites V2 más grandes, que Musk considera como fuentes de ingresos vitales para la economía de la empresa.
"Satellite V1, por sí mismo, es financieramente débil, mientras que V2 es fuerte", dice el correo electrónico. "Además, estamos aumentando la producción de terminales a varios millones de unidades por año, lo que consumirá un capital masivo, asumiendo que el satélite V2 estará en órbita para manejar la demanda de ancho de banda. De lo contrario, estos terminales serán inútiles", continúa.
SpaceX ya vale US$ 74.000 millones
Según comenta en el mail, para Musk el tiempo es vital en esta ocasión y necesitan apurarse para resolver el problema. "Todo se reduce a que enfrentamos un riesgo real de quiebra si no podemos lograr una tasa de vuelo de Starship de al menos una vez cada dos semanas el próximo año", se lee al final del mensaje.
Las cifras de SpaceX
Actualmente, SpaceX tiene una valuación de más de US$ 100.000 millones, lo que la convierte en la segunda compañía privada más grande del mundo luego de la startup china ByteDance. De acuerdo a las declaraciones de los analistas de Morgan Stanley, este gran potencial se debe a que lo que está haciendo la empresa estadounidense es desafiar cualquier noción preconcebida de lo que era posible y en el marco de tiempo posible, en términos de cohetes, vehículos de lanzamiento e infraestructura de apoyo.
Además de enfocarse en la industria del transporte espacial, SpaceX también se desarrolla en el ecosistema del internet satelital mediante su división semindependiente Starlink, conocida por apuntar a brindar un servicio de conexión que pueda llegar a toda parte del mundo.
Si bien se estima que Starlink, y, por ende, SpaceX, invierta alrededor de US$ 33.000 millones durante esta década, el flujo de efectivo sería positivo luego de 2031, lo que comenzaría a potenciar el negocio hasta hacerlo crecer de formas inimaginables. Más de un cliente nos ha dicho que si Elon Musk se convirtiera en el primer billonario, no será por Tesla. Otros han dicho que SpaceX puede eventualmente ser la empresa más valorada del mundo, concluyen en Morgan Stanley.