El 25 de agosto de 2020 será recordado como un día histórico para el mundo del fútbol y sobre todo para los fanáticos del Barcelona. ¿Quién iba a pensar años atrás que Lionel Messi dejaría el club catalán? Ni los madridistas más optimistas se animaban a imaginarlo, sin embargo ocurrió.
El anuncio del capitán causó una serie de reacciones y preguntas sobre las implicaciones legales que se desatarían si el delantero argentino persiste en su intención. El argentino le comunicó al Blaugrana su deseo de salir mediante un burofax, el cual tiene un peso importante cuando se esperan acciones legales que podrían llevar el caso a los tribunales.
¿Cómo sería la batalla legal que enfrentaría al jugador argentino con el club con el que pensaba terminar su vida futbolística?
Los deportistas, por lo general, siempre tienen un contrato de trabajo por un tiempo determinado; en caso de que un jugador no cumpla con la vigencia de su contrato, que otro club quiera adquirirlo o si el propio protagonista decide ya no continuar, puede pagar una penalización o una cláusula de rescisión, explicó a Forbes México Ricardo Galicia, abogado especialista en derecho deportivo y presidente de la Asociación de Abogados del Deporte de la Ciudad de México.
En el caso de Lionel Messi, al no ejecutar su decisión antes del 10 de junio, fecha contemplada en su contrato, el Barça lo dio automáticamente por renovado una temporada más, hasta el 30 de junio de 2021, y su cláusula de rescisión pasó a ser de 700 millones de euros.
Si llegara algún equipo interesado de Europa, de Asia o de la MLS a intentar adquirir al jugador o los derechos federativos del mismo, tendría que pagar la cantidad designada, señaló Galicia.
“Aquí la opción que podría tener el equipo que lo quiera adquirir es tratar de negociar con el Barcelona que no sea una cláusula tan alta alta y llegar a esa negociación ya con la intención del jugador de no estar en el club”, explicó. “Es importante saber que si no es del interés del jugador estar en un club, tampoco es lo más recomendable tenerlo a la fuerza”, añadió.
Si algún club se quiere llevar al jugador incumpliendo un contrato, la FIFA podría emitir una suspensión para que no pueda jugar en otro equipo hasta que no cumpla su contrato o pague esa cláusula de rescisión, según el Estatuto y la Transferencia de Jugadores de la FIFA.
Dado que la temporada no concluyó en tiempo y forma a causa de la pandemia de Covid-19, la defensa legal de Messi alega que no hay problema con que el delantero argentino haya anunciado su decisión hasta ahora, después del 10 de junio.
Pero en ese caso, “tendrían que entrar a un litigio forzoso, primero con la Liga Española y posteriormente, el caso se podría ir al TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo)”, destacó Galicia.
“Aquí obviamente dependería de la defensa del jugador y del club, pero eso no significa que sea 100% seguro, tendrían que ir previamente a un proceso legal”, advirtió.
Hasta hoy, no había existido un caso similar al de Lionel Messi, por lo que no hay un antecedente que ayude al jugador y todo dependerá de la estrategia jurídica que utilice tanto el Barcelona como el mismo jugador, señaló el especialista.
Autora: Noherely Hernández.
La nota se publicó originalmente en Forbes México.