Ayer fue el último día de Jeff Bezos como CEO de Amazon, poniendo fin a una notable racha de 27 años en la que el gigante del comercio electrónico se convirtió en una de las empresas públicas más valiosas del mundo, con una capitalización de mercado de US$ 1,8 billones.
En el proceso, su fortuna ha aumentado en un 12.425%, un aumento de US$ 196.000 millones desde 1998, cuando apareció por primera vez en la lista Forbes 400 de los estadounidenses más ricos con un patrimonio neto de US$ 1.600 millones. Ahora, vale casi US$ 202.000 millones, lo que lo convierte en la persona más rica de la Tierra.
Bezos seguirá ocupando el cargo de presidente Ejecutivo de Amazon, mientras que el director de Amazon Web Services, Andy Jassy, que se unió al minorista electrónico en 1997, asumirá las operaciones diarias como CEO el 5 de julio. Bezos no estará tan involucrado con la empresa que fundó en 1994; en su lugar, se centrará en sus otros intereses, incluidas sus organizaciones benéficas, Bezos Day One Fund y Bezos Earth Fund, así como en su compañía espacial comercial, Blue Origin, que lo llevará a él y a su hermano Mark al espacio el 20 de julio.
Bezos se convirtió en multimillonario por primera vez en 1998, un año después de que Amazon se hiciera pública como vendedor de libros en línea. En ese momento, la compañía apenas comenzaba a expandir los libros anteriores al permitir a los clientes comprar CD online. Ese año, el precio medio de las acciones de Amazon era de solo US$ 7,47, una fracción de los US$ 3487,40 que valen las acciones en la actualidad.
Durante las siguientes dos décadas, el negocio de Amazon comenzó a expandirse a otras industrias. En 2005, la compañía lanzó su ahora famoso servicio de membresía Prime, que ofrece a los clientes que pagaron una tarifa anual de US$ 79 por entrega gratuita en dos días. (Amazon Prime cuesta ahora US$ 119 al año).
En 2006, Amazon creó su unidad de computación en la nube Amazon Web Services, que ahora es el brazo más rentable de la empresa. Entró en transmisión de video en 2011; en comestibles al adquirir Whole Foods en 2017, en seguridad para el hogar con la compra de Ring en 2018 y también en producción de películas, que apunta a expandirse con su reciente oferta por los estudios MGM en mayo.
El gran tamaño y la creciente influencia de Amazon ha generado críticas de todos los rincones del espectro político. Los reguladores antimonopolio están investigando a la empresa, los activistas laborales buscan sindicalizar la extensa red de tiendas de Amazon, los legisladores progresistas han criticado públicamente la enorme riqueza de Bezos y los conservadores denunciaron la decisión de Amazon a principios de este año de eliminar un libro sobre cuestiones transgénero. Amazon respondió en ese momento diciendo que tiene una política de negarse a vender libros que encuadren las identidades LGBTQ como enfermedades mentales.
A pesar de los recientes obstáculos y preocupaciones antimonopolio, el precio de las acciones de Amazon siguió subiendo vertiginosamente, recompensando a su fundador con una fortuna cada vez mayor.
Bezos se convirtió en la persona más rica del mundo en 2018 cuando su patrimonio neto se duplicó, pasando de US$ 81.500 millones en octubre de 2017 a US$ 160.000 millones en octubre siguiente, gracias al elevado precio de las acciones de Amazon.
Venció a Bill Gates, Warren Buffett y Mark Zuckerberg, convirtiéndose en la primera persona en amasar una fortuna de 12 cifras en el ranking anual de Forbes de los 400 estadounidenses más ricos. Se ha mantenido en la cima de la lista desde entonces, particularmente cuando la pandemia llevó las acciones de Amazon a nuevas alturas. Elon Musk superó brevemente a Bezos como el más rico del mundo en enero de este año, y el jefe de LVMH, Bernard Arnault, de Francia, hizo lo mismo en mayo, pero el aumento de las acciones de Amazon lo volvió a colocar en la cima nuevamente.
Desde 2019, la fortuna de Bezos ha aumentado en un 73%, a pesar de que le dio una cuarta parte de sus acciones de Amazon a su ex esposa MacKenzie Scott cuando se divorciaron ese año.
Casi el 90% de su fortuna, alrededor de US$ 176.000 millones, reside en su participación del 10% en Amazon, estima Forbes. El resto se reparte entre su inversión en la empresa de cohetes Blue Origin, varios hogares en todo el país, el periódico Washington Post y una serie de inversiones en al menos dos docenas de empresas de tecnología y biotecnología. A lo largo de los años, Bezos ha vendido cerca de US$ 27.000 millones en acciones de Amazon (antes de impuestos), dejándolo con decenas de miles de millones para gastar como quiera. El tiempo dirá cómo elige seguir gastándolo.
*Publicada en Forbes US