El presidente del Grupo Techint, Paolo Rocca, destacó en diálogo con Forbes Argentina que, gracias a la cooperación entre las partes involucradas, el Gasoducto Presidente Néstor Kirchner comenzará a funcionar este martes tal como estaba previsto en la licitación. La empresa tuvo un rol fundamental en la obra de ingeniería que permitirá este año un ahorro superior a los US$2.000 millones en concepto de importaciones de Gas Natural Licuado (GNL), según estimaciones oficiales.
“La construcción del gasoducto es un ejemplo de proyecto cooperativo. Trabajamos todos juntos entre la Nación, provincias y empresarios para resolver los problemas entendiendo la importancia de dar gas a la Argentina y generar un ahorro en importaciones”, sostuvo Rocca tras su participación en el Día de la Educación y décimo aniversario de la creación de la Escuela Técnica Roberto Rocca (ETRR) al que asistieron más de 400 invitados.
La ETRR inaugurada por Tenaris, una de las empresas del Grupo Techint, se encuentra ubicada en la localidad bonaerense de Campana. El objetivo de la Escuela es formar técnicos de excelencia y dotar de empleabilidad a jóvenes de la zona. La institución fue recientemente rediseñada junto con Rosan Bosch, arquitecta danesa especialista en entornos de aprendizaje, buscando fomentar el desarrollo de las habilidades de los alumnos a través de un método de Aprendizaje Basado en Proyectos.
“El valor de la distinción que obtuvo hoy la ETRR como una de las 10 escuelas más innovadoras del mundo es para toda la comunidad, para inspirar a las escuelas y elevar el nivel educativo general. Trabajamos por una escuela que colabore y se integre a toda la comunidad”, resaltó Paolo Rocca durante su discurso por el Día de la Educación.
Durante el evento, varios ejecutivos de Techint se mostraron contentos por la próxima puesta en marcha del Gasoducto Néstor Kirchner. La obra que permitirá una mayor evacuación proveniente de Vaca Muerta atraviesa cuatro provincias desde la planta de tratamiento de gas en Tratayén en Neuquén, pasando por Río Negro y La Pampa hasta llegar a la localidad bonaerense de Salliqueló.
La construcción estuvo a cargo de las empresas Techint, Sacde y BTU bajo la supervisión de la compañía estatal Energía Argentina (ex Enarsa). Tal como estaba previsto en los pliegos de la licitación el gasoducto se pondrá en marcha a partir de este martes 20 de junio.
La construcción se realizó en un plazo de 10 meses, algo que al principio parecía imposible de cumplir. La magnitud de la primera etapa del gasoducto tendrá un impacto acorde en el suministro de hasta 21 millones de metros cúbicos (m3) de gas cuando en los próximos meses se complete la instalación de las plantas compresoras, lo que permitirá reducir las importaciones de GNL, así como el gas natural proveniente de Bolivia y la electricidad de países vecinos.
Tan solo este año se prevé que el fluido incremental que ofrecerá Vaca Muerta a través del gasoducto permitirá un ahorro superior a los US$ 2.000 millones en importaciones, de acuerdo con cálculos oficiales, un monto que se podría duplicar a partir del 2024.
Desde lo técnico, este martes se procederá a la puesta en funcionamiento de la estación de medición de la planta de Tratayén, y la habilitación de los primeros 29 kilómetros de ductos como parte de las fases de barrido de limpieza programadas y presurización de las cañerías. Así, de forma progresiva se habilitará el resto de las cinco etapas con la inyección de unos 25 millones de m3 de gas natural, que culminará el 9 de julio próximo con el acto inaugural formal de la obra.
La operatoria estará a cargo de la compañía transportadora TGS, con la cual Enarsa firmó en las últimas semanas un contrato de cinco años. La firma tendrá a su cargo la operación y mantenimiento de la primera etapa del gasoducto, situación que no significa una concesión ya que la titular es la empresa Energía Argentina.