El estudio más largo jamás realizado sobre la felicidad humana ha revelado algunas ideas fascinantes sobre lo que realmente conduce a la salud y la satisfacción a lo largo de la vida. Tuve la oportunidad de saber más del doctor Robert Waldinger, director del Estudio de Harvard sobre el Desarrollo Adulto, que lleva 80 años realizándose, mientras Chester Elton y yo entrevistábamos a Bob en el podcast Ansiedad en el trabajo.
El Dr. Waldinger es profesor de psiquiatría en la Facultad de Medicina de Harvard y autor del nuevo e importante libro "La buena vida". Durante más de 80 años, investigadores como Bob han seguido la vida de personas como parte de este estudio. El proyecto ha seguido a los participantes desde la adolescencia hasta la vejez, recopilando datos sobre su salud física y mental, trabajos, relaciones y mucho más.
A continuación, lo que, según Waldinger, son los elementos fundamentales que conducen a la felicidad y a una vida buena y larga:
Las relaciones son la clave de la salud y la felicidad
La conclusión número 1 del estudio de Harvard es que las relaciones estrechas y los vínculos sociales son cruciales para nuestro bienestar a medida que envejecemos. Tener relaciones que nos apoyen y nos nutran es un amortiguador contra el estrés de la vida y protege la salud en general. Según Waldinger, las buenas relaciones "nos mantienen más sanos y felices". Las personas con relaciones sociales más sólidas mostraron tasas más bajas de diabetes, artritis, deterioro cognitivo y otras afecciones crónicas. La hipótesis de los investigadores es que las relaciones íntimas actúan como "reguladores del estrés", es decir, ayudan a nuestro organismo a calmarse y recuperar el equilibrio después de haber sido agitado por acontecimientos difíciles.
No se limite a dejar que las amistades sucedan, sea proactivo
Más del 40% de los adultos afirman sentirse solos alguna vez o todas. Los participantes que cultivaron activamente las relaciones a lo largo de su vida cosecharon sus frutos. Pero no se limitaron a dejar que las cosas sucedieran. Hicieron planes con amigos, se pusieron en contacto con otras personas y se unieron a grupos sociales y comunitarios. Estas personas no se limitaban a publicar en Internet y esperar "me gusta"; como observó Waldinger, "Las personas que tuvieron más éxito en esto no lo dejaron al azar". Señaló que alimentaban intencionadamente sus conexiones sociales en persona.
El matrimonio tiene sus altibajos, pero proporciona apoyo para toda la vida
Según el estudio, la satisfacción conyugal es importante para la felicidad a largo plazo, pero con frecuencia sigue una curva en forma de U a lo largo del tiempo. Las personas son más felices cuando se juntan por primera vez, y luego la satisfacción disminuye cuando llegan los hijos, repunta cuando éstos se van de casa y vuelve a caer si los hijos adultos vuelven a vivir en casa. En general, sin embargo, tener un cónyuge que apoye a la pareja a lo largo de la vida aporta beneficios tangibles para la salud mental y física. El matrimonio ofrece a la pareja apoyo emocional en situaciones estresantes y puede ayudar a desarrollar la resiliencia.
Cuide su cuerpo a largo plazo
El estudio de Harvard descubrió que los participantes que hacían ejercicio con regularidad y mantenían su salud física durante toda la vida eran más capaces de prosperar hasta una edad avanzada. Uno de los centenarios que participaron en la investigación dio este consejo: "Cuida tu cuerpo como si fueras a necesitarlo durante 100 años".
Otros investigadores han llegado a conclusiones similares sobre el papel esencial que desempeñan las relaciones en el bienestar. El neurocientífico social John Cacioppo descubrió que la soledad activa la respuesta del organismo al estrés y puede provocar inflamación crónica. Su investigación resalta el papel equilibrador de las relaciones en la regulación de nuestro sistema nervioso. Asimismo, el economista del comportamiento Arthur Brooks ha estudiado la intersección de la felicidad, las relaciones y el propósito. Valida la conclusión del estudio de Harvard de que "cuidar nuestras relaciones" es fundamental, y que "nuestras conexiones con los demás son alimento para el cuerpo, la mente y el alma".
Como maestro zen practicante, Waldinger aporta una perspectiva única sobre el papel que desempeñan las relaciones en el bienestar. Señaló que su formación zen, centrada en el estudio del yo y la búsqueda de la iluminación, ofrece una ventana complementaria a la experiencia humana junto con su investigación en Harvard, que ha examinado la vida de los demás. Resume sus conclusiones de la siguiente manera: "La soledad mata. Las conexiones sociales son tan importantes para nuestra salud a largo plazo como la dieta y el ejercicio".
Aunque en una vida plena intervienen muchos ingredientes, el estudio de Harvard aclara que las relaciones son fundamentales. ¿Con quién has conectado hoy?
