Antes de finalizar el año, un nuevo informe relacionado a las expectativas, el estado de ánimo y el comportamiento de los trabajadores muestra cómo se encuentran los empleados de Argentina. Dentro de todos los datos, uno que se destacó y llamó la atención se refiere a la necesidad de mayor flexibilización.
El estudio fue llevado a cabo por Randstad, empresa que se dedica al servicio de Recursos Humanos, y se realizó en marco de la segunda edición del 2021 del Workmonitor. El mismo tiene como objetivo relevar las expectativas, estados de ánimo y comportamiento de los trabajadores en 34 países, incluido Argentina.
El deseo de flexibilidad laboral se registró en el 49% de los casos y es uno de los factores más valorados hoy por los trabajadores argentinos, explica el documento. Y agrega al respecto: Se encuentra en estrecha relación con las transformaciones que se han dado en el mundo del empleo con la pandemia y la implementación forzada del teletrabajo.
En esa línea, Andrea Ávila, CEO de Randstad para Argentina y Uruguay, señaló que el mundo del empleo ya no es el mismo. Y difícilmente vuelva a ser como lo conocíamos. El coronavirus demostró que otra manera de trabajar es posible e impuso un cambio radical de paradigma donde el trabajo remoto, a distancia y por objetivos es igual o más productivo que el trabajo con jornada fija frente a un escritorio. Esto ha disparado cambios de necesidades y expectativas de los trabajadores que no tiene vuelta atrás, indicó la experta.
Por otro lado, el estudio también revela que la demanda de balance entre trabajo y vida personal está llevando al 67% de los trabajadores del mundo a buscar un cambio. En Argentina, el 75% de los trabajadores se sienten listos para implementar las transformaciones necesarias para alcanzar un mayor equilibrio entre su vida personal y laboral.
Además, se percibe que la crisis sanitaria ha dejado una sensación de claridad en las personas a nivel global (72%) sobre sus expectativas y prioridades en el ámbito laboral. En Argentina, el 81% de los trabajadores consultados afirmó tener mayor claridad sobre sus objetivos profesionales tras el paso de la pandemia. Como consecuencia de esta mayor conciencia sobre sus necesidades, el 84% de los argentinos desea mayor flexibilidad en su trabajo, 8 puntos porcentuales por encima de la cifra arrojada para los trabajadores de todo el mundo, donde el 76% desea un empleo que les permita una mayor flexibilidad, se lee en el documento.
¿Cómo se sienten los argentinos con sus trabajos?
El Workmonitor consultó puntualmente a los participantes del estudio sobre cómo se sienten con respecto a los eventos recientes ocurridos en su vida y en su trabajo. En este sentido, el 56% de los argentinos afirmó que está contento con su trabajo, pero abierto a nuevas oportunidades si se alinean con sus objetivos profesionales y personales.
Para ampliar al respecto, el 18% de los consultados asegura que comenzó a buscar o está buscando un nuevo empleo activamente desde hace algún tiempo. Mientras que otro 18% aseguró que está contento con su situación actual y no planea cambiar de trabajo. Finalmente, un 8% está centrado en dedicar parte de su tiempo laboral a la capacitación y la adquisición de nuevas habilidades.
Sobre estos resultados, Andrea Ávila comentó que la pandemia llegó a nuestras vidas para cambiar las reglas de juego. Los datos del Workmonitor muestran que hoy los trabajadores argentinos están más conscientes de sus necesidades, tienen más claras sus prioridades, saben bien lo que quieren y se animan a ir por ello. Esta revolución silenciosa que estamos viviendo en el mundo del empleo está obligando a las organizaciones a adecuar sus propuestas de valor al empleado, a trabajar en forma personalizada en los esquemas de beneficios y, principalmente, en los arreglos de flexibilidad para poder retener al talento.
La gran renuncia
Este empoderamiento de la fuerza laboral está ligado directamente al cambio de prioridades y la toma de conciencia sobre las vicisitudes que puede presentar la vida que dejó el paso de la crisis sanitaria más grande que la humanidad haya visto a escala global. La situación ha inspirado a muchos a reconsiderar su manera de vivir, y gran cantidad de trabajadores están evaluando cambiar de trabajo, cambiar de carrera o, incluso, optar por un retiro anticipado.
Esto ha desencadenado en Estados Unidos y otros países un fenómeno conocido como la gran renuncia, donde cantidad de personas han dejado sus puestos de trabajo impulsados por una búsqueda de un cambio de estilo de vida bajo la premisa de que solo se vive una vez (o YOLO -you only live once-, por sus siglas en inglés).
Entre otros motivos para el cambio laboral, los encuestados también mencionaron las oportunidades de desarrollo profesional (47%); el trabajar en un entorno seguro (41%); contar con opciones de trabajo remoto (36%); tener un trabajo con niveles de estrés manejables (32%); trabajar en un entorno cuidado (32%); tener un empleador respetuoso y cuidadoso (30%); la oportunidad de adquirir más habilidades laborales (29%); tener un trabajo con propósito (27%); tener un jefe que lo defienda (24%); trabajar para una empresa innovadora y en crecimiento (21%); trabajar en un lugar que facilite la conexión con otras personas (18%).
Después de casi dos años muy críticos para el empleo, en Argentina se vislumbra un panorama más esperanzador. Es en estos momentos donde los trabajadores analizan dónde están parados a nivel laboral, evalúan cómo se comportaron sus empleadores durante la pandemia y empiezan a tomar decisiones en base a su nuevas prioridades y expectativas en torno a su desarrollo profesional y personal, concluyó Andrea Ávila.