Los rockeros Phil Collins, Mike Rutherford y Tony Banks vendieron los derechos de su música individual y de su trabajo juntos en la banda Génesis a Concord Music Group Inc.,por más de US$ 300 millones, informó el jueves el Wall Street Journal, convirtiéndose en las últimas leyendas de la música en sacar provecho de sus catálogos por una fuerte suma.
Datos clave
- El acuerdo incluye los derechos de publicación, los flujos de ingresos de la música ya grabada y los masters individuales de Collins, Rutherford y Banks.
- Bruce Springsteen vendió los derechos de publicación de su música grabada y sus composiciones por casi US$ 500 millones, según informaron fuentes a Forbes, en diciembre del año pasado.
- Paul Simon vendió su catálogo por unos supuestos US$ 250 millones en marzo de 2021.
- Bob Dylan vendió su catálogo grabado a Sony Music por más de US$ 150 millones en enero, un año después de que vendiera su catálogo de composiciones a Universal Music Publishing Group, por unos supuestos US$ 400 millones.
-Neil Young vendió el 50% de sus derechos de publicación el año pasado a Hipgnosis Songs Fund, por una cifra que, según se informa, asciende a US$ 150 millones.
-Lindsey Buckingham, de Fleetwood Mac, vendió sus derechos de publicación a Hipgnosis; Stevie Nicks vendió una parte de los suyos a Primary Wave por unos US$100 millones; y Mick Fleetwood vendió los suyos a BMG, cubriendo sus trabajos individuales y sus canciones escritas para la banda.
-Sting vendió su catálogo en febrero por unos US$ 300 millones.
Antecedentes clave
Los músicos de la vieja escuela no son los únicos que hacen tratos sobre sus catálogos musicales. Justin Timberlake vendió el suyo a Hignosis en mayo por, al parecer, más de US$ 100 millones. Jason Aldean vendió una parte de su catálogo a Spirit Music, también según se informa, por US$ 100 millones.
Este mes se informó de que Kanye West estaba buscando discretamente un acuerdo, pero el rapero y diseñador de moda dijo en las redes sociales que sus derechos no estaban a la venta, y que se estaban poniendo a disposición sin su conocimiento.
Hecho sorprendente
Cuando los cierres de Covid-19 dificultaron las giras, los artistas recurrieron a las ventas por catálogo como forma de generar ingresos. Los acuerdos también son beneficiosos a efectos fiscales y de planificación patrimonial, según Rolling Stone.