En un movimiento sin precedentes hacia la energía más limpia y la reducción de emisiones, siete de los principales fabricantes de automóviles del mundo (BMW Group, General Motors, Honda, Hyundai, Kia, Mercedes-Benz Group y Stellantis NV) han anunciado una empresa conjunta para construir un edificio líder de alto red de carga alimentada en América del Norte. Esta alianza estratégica está configurada para mejorar significativamente el acceso a la carga de alta potencia en la región, impulsando la transición a vehículos eléctricos (VE) a gran escala.
Esta empresa conjunta será pionera en el desarrollo de una extensa red de carga, con el objetivo de instalar al menos 30 000 puntos de carga de alta potencia en varios lugares urbanos y rutas en América del Norte. La ubicación estratégica de estos puntos de carga garantizará que los clientes tengan la flexibilidad de cargar sus vehículos eléctricos cuando y donde sea necesario. Las estaciones, cuya apertura está programada para el verano de 2024, serán de acceso universal para todos los clientes de vehículos eléctricos. Están diseñados para adaptarse a los conectores del Sistema de carga combinado (CCS) y del Estándar de carga norteamericano (NACS), por lo que se adaptan a una amplia gama de vehículos eléctricos.
En un esfuerzo concertado para elevar el nivel de la experiencia del cliente, el consorcio recién formado se centrará en brindar confiabilidad, capacidad de carga de alta potencia e integración digital. Las estaciones se ubicarán en lugares atractivos, a menudo acompañadas de varios servicios para garantizar una experiencia de carga cómoda y conveniente para los clientes. Además, en consonancia con las estrategias de sostenibilidad de los siete fabricantes de automóviles, la empresa conjunta se compromete a alimentar la red de carga únicamente con energía renovable. Según las proyecciones actuales, se espera que el primer conjunto de estaciones debute en los Estados Unidos en 2024 y en Canadá en una etapa posterior. Cada sitio estará equipado con múltiples cargadores de CC de alta potencia, lo que hará que los viajes de larga distancia sean más factibles para los clientes.
Un objetivo clave de la empresa conjunta es mejorar toda la experiencia EV y fomentar la adopción de EV. Para hacer esto, la red proporcionará una experiencia de carga de primer nivel, integrada en el vehículo y sin problemas, respaldada por la calidad, la confiabilidad y los recursos de los principales fabricantes de automóviles a nivel mundial. Esta empresa conjunta llega en un momento en que la demanda de carga pública rápida y confiable está aumentando en paralelo con el aumento en la cantidad de vehículos eléctricos. Según el Departamento de Energía de EE. UU., había 32 000 cargadores rápidos de CC disponibles públicamente en EE. UU. para que los usaran 2,3 millones de vehículos eléctricos en julio de 2023. Dado que se prevé que las ventas de vehículos eléctricos en EE. UU. representen más del 50 % de las ventas totales en EE. UU. para 2030 , la necesidad de una infraestructura de carga confiable solo crecerá.
Los directores ejecutivos de todos los socios fundadores expresaron optimismo y determinación hacia el esfuerzo colectivo, enfatizando su compromiso de acelerar la transición a los vehículos eléctricos, mejorar la experiencia del cliente, luchar contra el cambio climático y trabajar hacia una visión común del transporte sostenible.
El objetivo colectivo de esta empresa es garantizar que la infraestructura EV en evolución respalde las ventas proyectadas de EV y promueva la adopción más amplia de vehículos eléctricos. Este esfuerzo significa un gran paso adelante en la búsqueda de energía más limpia, emisiones reducidas y un futuro más sostenible por parte de la industria automotriz.
*Con información de Forbes US